CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Marcando una ruptura con sus antecesores de ultraderecha Donald Trump y Jair Bolsonaro, los presidentes Joe Biden y Luiz Inácio Lula Da Silva refrendaron hoy los compromisos de Estados Unidos y Brasil por reforzar las "instituciones democráticas" y rechazar "el extremismo y la violencia en la política", así como los "discursos de odio" y la "desinformación".

Tanto Lula como Biden llegaron al poder a pesar de los intentos de Trump y Biden por sabotear las elecciones difundiendo mentiras sobre presuntos fraudes; tanto en Estados Unidos como en Brasil, seguidores de los exmandatarios tomaron sedes de instituciones por la fuerza, en intentos de golpe de Estado que no tuvieron éxito.

En conclusión de una muy esperada visita oficial de Lula a Washington, los mandatarios emitieron una declaración conjunta con un tono radicalmente distinto al de las administraciones pasadas: en ella, promovieron los derechos humanos y el combate al cambio climático --contra la deforestación de la selva amazónica entre otros--, así como los avances en derechos laborales y derechos de las personas LGBTIQ+, o la lucha contra la discriminación racial.

Los líderes de los países más poblados de América pusieron también el combate contra el hambre y la pobreza sobre la mesa, y expresaron su interés en reforzar las inversiones bilaterales y los lazos comerciales.

La extensa declaración conjunta marca la coincidencia de Biden y Lula sobre los principales temas de interés, ya sea político y económico, pero también diplomático, con una condena a la invasión militar de Rusia contra Ucrania.