PRAGA (France24).- La policía checa investiga si David Kozak, autor del tiroteo del jueves 21 en la Universidad Carolina de Praga, es también responsable del asesinato de un hombre y su bebé de dos meses cometido el viernes 15 en un bosque de Klanovicky, a 40 minutos de Praga.

El jueves 21, Kozak, estudiante de Historia, se habría colocado en una terraza del edificio de la Facultad de Artes de la Universidad Carolina, desde donde abrió fuego aleatoriamente; una enorme cantidad de municiones quedaron regadas en los pasillos del lugar, lo que llevó a la policía a considerar inicialmente que tenía un cómplice.

El atacante se suicidó con un arma de corto alcance al verse rodeado por oficiales. Ahora las autoridades investigan si Kozak es también responsable del doble asesinato cometido en el bosque de Klanovicky, así como de la muerte de su propio padre, quien fue encontrado muerto en su casa de Kladensko.

En conferencia de prensa, el vocero de la policía Martin Vondracek informó que el ataque en la universidad dejó 15 muertos incluido el atacante, y decenas de heridos.

El viernes 15, un hombre y su bebé de dos meses fueron encontrados muertos en Klanovicky. Los vecinos dijeron que escucharon disparos en el bosque y, al acudir a atender la emergencia, las autoridades encontraron los cuerpos del hombre y su hija. De inmediato se emitieron alertas ante la posibilidad de que el atacante se encontrara todavía en los alrededores.

“Estamos trabajando seriamente en la hipótesis de que el atacante de la universidad es también responsable de esos dos homicidios en Klanovicky.”

Ataque aleatorio

Trece personas murieron a raíz del ataque en la Universidad Carolina de Praga, el peor tiroteo masivo en la historia de la República Checa; una persona más falleció posteriormente en el hospital, además del autor de la matanza, quien se suicidó; de los 25 heridos, 12 se encuentran en estado grave.

El director de la policía de Praga, Petr Matejcek, detalló que la mayoría de las víctimas eran mujeres, pero se cree que fue un resultado fortuito. Tres de los heridos son extranjeros: un ciudadano neerlandés y dos emiratíes que hacán turismo en la ciudad.

Hasta el momento no hay indicios que lleven a creer que Kozak se encontraba afiliado o que actuaba bajo la influencia de algún culto o ideología extremista, indicó el ministro del Interior, Vit Rakusan.

Estudiantes y personal de la universidad de Carolina, así como deudos de víctimas alcanzadas por los disparos en la plaza Jan Palach, aledaña al establecimiento educativo, se concentraron en uno de los edificios del centro de estudios para realizar una vigilia y rendir homenaje a los fallecidos.

A ellos se unieron el presidente Petr Pavel, el primer ministro Petr Fiala y el embajador de Estados Unidos en República Checa, Bijan Sabet.

Armados, pero no violentos

Unas 300 mil personas poseen armas de fuego en República Checa, país con 10.9 millones de habitantes que no tiene historial de violencia armada ni de ataques masivos.

El peor ocurrió en 2015, cuando un hombre, antes de suicidarse, mató a ocho personas en un restaurante en Uhersky Brod. En 2019 otro sujeto mató a seis personas en la sala de espera de un hospital y luego huyó, aunque fue alcanzado por los disparos de la policía.

Ante las acusaciones de que tardaron mucho en reducir al atacante de la universidad, las autoridades checas argumentaron que antes tuvieron que tomar todas las medidas necesarias para evitar que en un eventual intercambio de disparos cayeran más víctimas inocentes.

La policía asegura que la enorme cantidad de municiones que llevaba consigo Kozak sugerían la intención de perpetrar una masacre mucho peor, la que habría sido frustrada por la rápida llegada de los agentes.