BOGOTÁ (AP).— Con la exigencia de que la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) deje en libertad al padre del jugador colombiano Luis Díaz, secuestrado hace una semana en la localidad colombiana de Barrancas, decenas de pobladores realizaron el domingo 5 de noviembre una manifestación pidiendo su pronta liberación.

Al llamado se sumó el futbolista del Liverpool desde Inglaterra.

En un comunicado que difundió en su cuenta de X, antes Twitter, Luis Díaz se pronunció por primera vez desde el secuestro de su padre suplicando al ELN “lo liberen de inmediato respetando su integridad” y poner fin a una “dolorosa espera”.

“Cada segundo, cada minuto crece nuestra angustia”, aseveró el también jugador de la selección colombiana. Admitió no tener palabras para describir el sufrimiento que sólo terminará cuando su padre esté de vuelta en casa.

El futbolista pidió también a los organismos internacionales interceder para conseguir su libertad.

El delantero del Liverpool anotó un gol el domingo en el partido de la Liga Premier frente al Luton, tras lo cual dejó leer en su camiseta el mensaje: “Libertad para papá”.

Más temprano desde Barrancas, la madre del jugador Cilenis Marulanda imploró por la liberación de su esposo durante la manifestación en esa localidad colombiana.

“La gente mala que lo tiene en su poder, que me lo liberen ya, que nosotros queremos tenerlo en nuestro hogar”, dijo la madre visiblemente afectada.

Marulanda fue secuestrada junto a Díaz por sujetos armados en motocicletas. Aunque ella quedó libre pocas horas después, su esposo permanece retenido por hombres del Frente de Guerra Norte del Ejército de Liberación Nacional (ELN), según admitió la misma guerrilla.

El sábado 4 de noviembre, el máximo cabecilla de la agrupación armada, alias Antonio García, aseguró en un mensaje enviado por un chat de periodistas que el secuestro de Manuel Díaz fue “un error” y que el comando ha instruido a la unidad su liberación, aunque no ha dado pistas de cuándo y cómo se concretará.

Portando fotografías del “profe Mane”, como llaman al padre del jugador que también dirige una escuela de futbol en Barrancas, vistiendo prendas blancas y al grito de “libertad, libertad, libertad”, los pobladores se congregaron en los exteriores de la casa de los padres del entrenador.

Allí hubo discursos, oraciones y música.

“Ya basta de los secuestros en Colombia, porque es tiempo de vivir todos en paz”, cantó al son de vallenato Edilson Zurita, en una composición que hizo para su amigo “Mane Díaz”.

“Le pedimos al gobierno que interceda para que lo liberen (…) ya está bueno de tanto maltrato a la población civil”, dijo a la prensa Antonio Solano, amigo de la familia, mientras el secretario del gobierno municipal de Barrancas, Carlos Peralta, reafirmó que “el mensaje es bastante claro y es la liberación ya”.

En tanto, los medios colombianos destacaban el domingo la convocatoria del Liverpool a Luis Díaz como suplente, en el partido de la Liga Premier en el que enfrentó al Luton Town.

El secuestro del padre de Díaz ha impactado negativamente, según analistas, en las negociaciones de paz entre el gobierno de Gustavo Petro y el ELN que entre agosto de 2023 y enero de 2024 acordaron un cese al fuego.