BERLÍN (AP) — La oposición centroderechista de Alemania ganó dos elecciones estatales el domingo, cuando el impopular gobierno nacional del canciller Olaf Scholz llega a su punto medio, según proyecciones, mientras que un partido de la extrema derecha que ha estado arriba en los sondeos nacionales celebró importantes avances.

Las votaciones se produjeron luego de una campaña marcada por el descontento debido a las discusiones constantes en el gobierno nacional y por la presión para reducir el número de migrantes que llegan a Alemania. La ministra nacional del Interior, quien encabeza la respuesta federal en materia migratoria, sufrió un duro revés en el complicado intento por convertirse en gobernadora de su estado natal.

Alrededor de 9.4 millones de personas eran elegibles votar para la nueva legislatura estatal en Baviera y unas 4.3 millones en la vecina Hesse, una región que incluye a la capital financiera de Alemania, Fráncfort. Ambos estados ya eran liderados por el principal bloque opositor del país, Unión, conformado por la Unión Demócrata Cristiana, y la Unión Socialcristiana de Baviera.

Las proyecciones de las cadenas de televisión pública ARD y ZDF, basadas en las encuestas de salida y los avances del cómputo, mostraron que el CSU, que ha gobernado a Baviera desde 1957, extendería esa racha con un apoyo de casi 37% — un cambio mínimo respecto a hace cinco años y alrededor de 20 puntos por delante de su rival más cercano. En Hesse, el CDU registraba avances con alrededor del 34% de los votos, también muy por delante de sus rivales.

El partido de ultraderechista Alternativa de Alemania, que ha ascendido al segundo lugar en las encuesta nacionales detrás de Unión, no será un factor para determinar los nuevos gobiernos estatales, ya que otros partidos se negaron a trabajar con él.