MADRID (EUROPA PRESS).- La representante republicana por el estado de Wyoming, Liz Cheney, principal crítica de su partido hacia el expresidente Donald Trump, perdió este martes las primarias, frente a su rival Harriet Hageman, quien contaba con el apoyo del exmandatario.

Cheney, quien votó a favor de acusar a Trump por el asalto al Capitolio y es vicepresidenta del comité que investiga al exmandatario, perdió las primarias del Partido Republicano, por lo que pierde su escaño en el Congreso, según los medios estadounidenses.

Después de que los resultados preliminares dieron la victoria a Hageman, Cheney afirmó en declaraciones desde la ciudad de Jackson que "defender la verdad honra a todos los que lo dieron todo".

"Debemos comportarnos de forma digna con los hombres y mujeres que llevan el uniforme de esta nación y, en particular, con aquellos que han dado el último sacrificio", afirmó. Así, indicó que "esto no es un juego": "Cada uno de nosotros debe estar comprometido" con la defensa de Estados Unidos, según informó el canal CNN.

En este sentido, aseguró que su victoria habría estado asegurada si hubiese estado "de acuerdo con la mentira del presidente Trump sobre las elecciones de 2020". "Hace dos años, gané estas primarias con el 73 por ciento de los votos. Podría haber hecho fácilmente lo mismo de nuevo. El camino estaba claro", declaró.

Cheney agregó que "ningún escaño en la Cámara, ningún cargo en esta tierra es más importante que los principios que todos hemos jurado proteger".

La republicana, ante sus partidarios, reconoció la derrota de su oponente. Así, indicó que traicionar los principios democráticos --en el caso de no reconocer una derrota electoral-- precipita a la nación hacia una crisis de anarquía y violencia, refiriéndose a la actuación de Trump tras las elecciones de 2020.

"He dicho desde el 6 de enero que haré lo que sea necesario para asegurarme de que Donald Trump no vuelva a estar cerca del Despacho Oval y lo digo en serio", advirtió.