MADRID (EUROPA PRESS).– La Marina de México confirmó que el helicóptero 'Black Kawk' involucrado en la detención del narcotraficante Rafael Caro Quintero, y accidentado el viernes en el estado de Sinaloa, no fue derribado, sino que el suceso fue un accidente.

Las autoridades mexicanas confirmaron el viernes la muerte de 14 personas tras desplomarse un helicóptero de la Marina en el estado de Sinaloa, en el noroeste mexicano. Contradiciendo la primera versión de las autoridades, el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que la aeronave estaba cumpliendo la misión de "respaldar a quienes ejecutaron la orden de aprehensión en contra de Rafael Caro Quintero".

Ahora, tras la polémica generada, fuentes de la Marina confirmaron al diario mexicano 'El Universal' que, pese a que el helicóptero estuviera involucrado en el caso del narcotraficante, su caída al suelo fue fruto de un accidente y no de un ataque, si bien se ha puesto en marcha una comisión investigadora que arroje luz sobre lo ocurrido.

El fin de semana las autoridades mexicanas concluyeron con la detención de Caro Quintero, uno de los 10 hombres más buscados en el mundo y por el que la Justicia de Estados Unidos ofrecía hasta 20 millones de dólares –cerca de 19.7 millones de euros–.

Una de las aeronaves que participaba en el operativo, con 15 personas a bordo, se desplomó cerca del aeropuerto internacional de Los Mochis, quedando tan sólo un ocupante vivo, aunque herido de gravedad.