BOGOTÁ (proceso.com.mx).– En medio de la crispación política por las elecciones, la Defensoría del Pueblo (equivalente a la Comisión Nacional de Derechos Humanos) señaló que 290 municipios del país, la cuarta parte del total, están “en riesgo alto y extremo” de que ocurran hechos de violencia durante la jornada electoral del domingo.

Sectores de la derecha han llegado a afirmar que Petro tiene listos contingentes de la “primera línea” y los “escudos azules” –grupos de estudiantes que enfrentaron a la policía en la represión de las protestas sociales del año pasado— para causar desórdenes si Petro pierde las elecciones.

El mismo director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, afirmó que, según información de inteligencia, hay grupos que están convocando a cometer actos violentos en el marco de la jornada electoral de este domingo.

Según Vargas, esas convocatorias se realizan “a través de redes sociales, de perfiles apócrifos y anónimos en la red oscura y red profunda, en donde llaman a cometer actos violentos y desconocer los resultados electorales”, por lo que la policía estará en “alerta máxima” en ciudades como Bogotá, Medellín, Cali, Popayán y Pereira.

La Fiscalía ha capturado en las últimas horas a unos 20 integrantes de la llamada “primera línea” en Bucaramanga y en la suroccidental Cali, epicentro de las protestas sociales del año pasado y centro de la represión policiaca, que causó unos 44 muertos en todo el país, según un informe de Naciones Unidas.

El gobierno de Estados Unidos alertó a sus ciudadanos que residen o visitan Colombia que se han detectado “planes de grupos radicales para rechazar los resultados de la votación electoral y cometer actos de violencia en todo el país” y que “existe la posibilidad de manifestaciones, interrupciones del tráfico y presencia policial visible durante las campañas previas y el día de las elecciones”.

Lo cierto es que en Colombia hay antecedentes de sublevaciones sociales espontáneas ante hechos atroces, como el magnicidio del líder liberal Jorge Eliécer Gaitán, el 8 de abril de 1948, que provocó una ola de protestas en Bogotá –conocidas como “El Bogotazo”–, las cuales se extendieron a otras ciudadanes y dieron inició a un periodo conocido como “La Violencia”, en el que murieron miles de colombianos.

“En horas como esta, todos los líderes políticos deben tener un gran sentido de responsabilidad y poner su parte para que estas elecciones se resuelvan en el marco de la democracia y el estado de derecho”, señala Valencia.