WASHINGTON (apro).– El gobierno del presidente estadunidense, Joe Biden, anunció que de manera expedita procesará las solicitudes de asilo de ciudadanos extranjeros sujetos a una deportación rápida siempre y cuando sean creíbles sus casos de persecución en su país de origen.

Por medio de un comunicado de prensa conjunto, los departamentos de Justicia y Seguridad Interior (DHS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, enfatiza que la determinación es para aliviar la angustia de los peticionarios y dar salida a los casos.

“Se emite una medida para mejorar y acelerar el proceso de solicitudes de asilo hecha por extranjeros sujetos a una deportación expedita, garantizando a aquellos que son elegibles la asignación rápida del asilo y la repatriación para quienes no lo son”, expone el comunicado.

La orden de las dos secretarías del gabinete de Biden autoriza a los oficiales del Servicio de Inmigración y Ciudadanía del DHS, resolver los casos de solicitud de asilo de extranjeros bajo orden de deportación siempre y cuando sean válidos y verificables sus argumentos.

“Para aquellos que comprueben el miedo a ser perseguidos, de ser sometidos a tortura y que aprueben el escrutinio de temor; actualmente dichos casos son determinados por jueces de inmigración”, subrayan el Departamento de Justicia y el de Seguridad Interior.

Con la orden ejecutiva lo que se hace es que los oficiales de Inmigración y Ciudadanía revisen los casos en lugar de que sean los jueces, y al determinar la credibilidad a la petición, asignar el asilo en lugar de esperar meses y hasta años para darle salida a los casos.

El gobierno de Biden estipula con esta acción se podrán desatascar las cortes migratorias de los miles de casos de peticiones de asilo, lo que significaría para un extranjero con una exigencia creíble el recibir en meses una respuesta a su caso en lugar de esperar hasta cinco años.

“Por medio de esta regla estamos construyendo un sistema de asilo más funcional y sensible que permitirá la repatriación rápida para aquellos que no son elegibles, mientras otorgará protección humanitaria expedita a los casos creíbles”, indicó Alejandro Mayorkas, titular del DHS.

El gobierno de Biden aclaró que la nueva regulación no se aplica para los menores de edad extranjeros que llegaron solos como inmigrantes indocumentados a los Estados Unidos y que a los que se les niegue el asilo serán deportados rápidamente a sus países de origen.

“La medida ayudará a reducir la carga en las cortes migratorias, protegerá los derechos de aquellos que huyen de la persecución y violencia y permitirá a los jueces migratorios determinar la deportación de una persona cuando se apropiado”, anotó por su parte Merrick Garland, Procurador General de Justicia de Estados Unidos.