CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Por cuarto día consecutivo, rescatistas de la Dirección de Protección Civil marroquí intentan rescatar a Rayan, un niño de 5 años que estaba jugando cuando cayó a un pozo de 32 metros de profundidad, en el pueblo de Igrán, de la provincia de Chahuen, en Marruecos.

“Es mi pozo, yo estaba reparándolo y Rayan estaba a mi lado. En un momento dado, él se cayó y yo no me di cuenta. Alertamos a las autoridades y todos los vecinos han venido a apoyarnos. Todo el mundo ha hecho lo máximo para que él salga con vida y que yo pueda tomarlo entre mis brazos esta noche. Pero no les oculto que tanto su madre como yo estamos destrozados y muy nerviosos”, confesó el padre del niño al sitio digital Le360.

En conferencia de prensa, el portavoz del presidente de Marruecos, Mustafa Baitas, aseguró que el gobierno se había movilizado “fuertemente” y que no tendrían problemas en pedir ayuda exterior, pero hasta el momento contaban con equipo y experiencia para realizar el rescate.

Este viernes, los rescatistas se acercaron, por fin, al niño, pero están entrando en la etapa más delicada de la operación, pues intentan sacarlo con vida, después de que el martes, alrededor de las 14:00 horas, el niño cayó al pozo.

El jueves, los rescatistas abrieron un túnel paralelo y a las 21:30 horas habían excavado 27 metros, encontrándose a solo 5 metros del niño, pero el terreno rocoso les dificultó el avance, informó.

Las cámaras introducidas en el pozo mostraron al niño vivo y consciente, con algunas heridas en la cabeza. Los equipos de rescate han bajado una máscara de oxígeno, comida y agua azucarada.

Decenas de policías, fuerzas auxiliares y miembros de la Gendarmería Real, además de Protección Civil, participan en el operativo que mantiene en vilo a los marroquíes.

En el lugar está un equipo médico del hospital provincial de Chauen, con reanimadores y anestesistas, aguardan junto a la excavación, en espera del rescate del menor para auscultarlo y revisar su estado de salud.

La alcaldía dispuso un helicóptero y las autoridades pidieron a los curiosos despejar la zona para dejar trabajar a los profesionales.

El presidente de la Asociación de Espeleología y Actividades de Montaña de Chefchaouen, Mohamed Yassin al Quahabi, quien ayuda en el rescate del menor, dijo a la BBC que la estrechez del pozo ha dificultado la tarea de sacar al niño a la superficie. Lo han intentado sin éxito.

En el lugar trabajan 5 excavadoras que están haciendo una abertura paralela en el terreno para poder tener acceso a donde está el niño, pues consideraron que es la única forma de que lo rescaten.

La preocupación de las autoridades es que una falla humana o un movimiento brusco lastime accidentalmente a Rayan.