BRUSELAS, (EUROPA PRESS).- La Unión Europea exigió este martes a Rusia que dé marcha atrás en la decisión de reconocer la independencia de las regiones separatistas ucranianas de Donetsk y Lugansk, asegurando que responderá a la maniobra urgentemente con sanciones.

"Urgimos a Rusia, como parte del conflicto, que revierta el reconocimiento, respete sus compromisos, siga el Derecho Internacional y vuelva a las negociaciones dentro del formato de Normandía y el Grupo Trilateral de Contacto", ha señalado el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, en una declaración a Veintisiete.

En este sentido, la UE condena la maniobra del presidente ruso, Vladimir Putin, de reconocer como entidades independientes a las autoproclamadas repúblicas del este de Ucrania y carga contra la decisión de enviar tropas rusas a la zona. "Este acto ilegal socava más la soberanía e independencia de Ucrania y representa una grave ruptura del Derecho Internacional y los acuerdos internacionales", ha recogido la declaración.

Borrell asegura que la decisión de Putin va contra su responsabilidad de lograr una salida pacífica a la crisis en Ucrania y lamenta que este paso es una clara violación de los acuerdos de Minsk, que estipulan la vuelta de estas zonas a control del Gobierno de Ucrania.

Según advierte el jefe de la diplomacia comunitaria, la situación en las autodenominadas repúblicas es un "pretexto" para redoblar la presión militar contra Ucrania y advierte que los tratados de amistad son otra estrategia para fabricar este conflicto.

Por todo ello, avisa a Moscú de que la UE responderá de forma urgente a la crisis en el este de Ucrania con "medidas restrictivas adicionales" y detalla que las sanciones afectarán tanto a las relaciones económicas con estos dos enclaves como a las personas responsables de su reconocimiento.

Fuentes diplomáticas europeas señalan que las restricciones afectarán a cientos de dirigentes rusos, incluyendo a los representantes de la Duma que votaron el reconocimiento, los altos funcionarios que propusieron la medida y los mandos militares responsables del envío de tropas rusas al Donbás.

En total serían unas 400 personas y entidades implicadas en una maniobra que para la UE representa una violación flagrante de la integridad territorial de Ucrania y pone en jaque los acuerdos de Minsk.