MADRID (Europa Press).– La Policía francesa utilizó este sábado cañones de agua y gases lacrimógenos para dispersar una nueva concentración multitudinaria en París, por segunda semana consecutiva, contra los planes para introducir un certificado nacional de vacunación en el país.

La marcha fue en su mayor parte pacífica, hasta que unas decenas de concentrados se atrincheraron en la Plaza de la Bastilla.

Al menos tres policías resultaron heridos en las manifestaciones de París, según fuentes de la Prefectura de Policía a BFM-TV. De momento se desconoce el número de detenidos.

Las manifestaciones se repitieron también en otras ciudades de Francia.

En Montpellier, la manifestación reunió a ocho mil 500 personas, según la prefectura, una cifra que ha aumentado considerablemente en comparación con las cinco mil 500 de hace una semana.

Además, cuatro mil 800 personas se dieron cita en Marsella y más de mil 200 personas marcharon en dos procesiones en Lyon. En Limoges, tres mil personas marcharon en paz, según France 3 Limousin.