Violencia de género
Francia: mujer podría enfrentar cadena perpetua por matar a su padrastro que la violó desde los 12 años
Este lunes inició el juicio contra Valérie, acusada de haber asesinado a Daniel Polette, quien la obligó a casarse con él y a prostituirse.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Valérie Bacot podría enfrentar cadena perpetua por asesinar a su padrastro, quien desde los 12 años la violó y después la obligó a casarse con él.
El infierno no terminó ahí. Daniel Polette continuó abusando de ella, la torturó y la prostituyó.
Este lunes inició el juicio en una corte de Saône-et-Loire, en el centro de Francia. Durante dos horas, entre lágrimas, Valérie, de 35 años, contó el infierno que vivió hasta el 13 de marzo de 2016, cuando le disparó a su agresor en la nuca mientras él iba manejando.
Mató a su padrastro, de 61 años, padre de sus cuatro hijos, con la misma arma con la que él la amenazaba, y enterró su cadáver en el bosque, informó AFP.
Daniel Polette era pareja sentimental de la madre de Valérie, pero cuando ésta tenía 12 años abusó sexualmente de ella y continuó haciéndolo hasta que un familiar lo denunció. El sujeto cumplió una condena de cinco años de prisión. Cuando salió libre reanudó los abusos, hasta que Valérie quedó embarazada a los 17 años. Su madre la corrió de la casa, por lo que se fue a vivir con su abusador, con quien luego se casó.
Durante 18 años de matrimonio no cesaron los abusos de Polette, que Valérie describe como un “auténtico infierno”, porque sufrió reiteradas violaciones, palizas, amenazas de muerte y la obligó a prostituirse en la parte trasera de su auto, y desde un auricular le daba instrucciones para satisfacer al cliente.
“Siempre encontraba algo. Al principio eran bofetadas, luego se convirtieron en patadas, puñetazos y me estrangulaba. Con el paso del tiempo, hubo amenazas con arma”, comentó.
En una Navidad el hombre, quien era alcohólico, la golpeó con un martillo y otro día la estranguló hasta dejarla inconsciente, pese a que estaba embarazada.
En medio de estos abusos, Valérie tuvo cuatro hijos con Polette, quienes también fueron maltratados. Quiso huir muchas veces, pero tenía miedo por el nivel de violencia ejercida por el hombre, quien la amenazaba continuamente con la pistola.
Lo que la animó a cometer el crimen fue cuando su hija Karline, de 14 años, le contó que su padre le había preguntado cómo era sexualmente.
Dos de los hijos, de 17 y 16 años, junto con el novio de una de sus hijas, de 16 años, fueron condenados en 2020 por haber ayudado a Valérie a ocultar el cadáver y encubrir el delito.
En 2017, la policía francesa encontró el cadáver y arrestó a Valérie, quien había denunciado su desaparición. Desde que la arrestaron confesó el asesinato de su abusador, en medio de una discusión porque Polette quería que siguiera prostituyéndose.
La división entre la población está muy marcada, pues se abrió el debate público sobre la violencia machista ejercida contra las mujeres. Para la mayoría de los franceses, Valérie es una víctima por la sistémica violencia sufrida desde que era menor de edad.
En la plataforma Change.org hay una petición para exigir la libertad de Valérie, que ha recabado 600 mil firmas. En contraparte, los fiscales franceses piden cadena perpetua para la mujer, porque el asesinato fue premeditado.
“Estas mujeres que son víctimas de violencia no tienen protección. El poder judicial sigue siendo demasiado lento, no lo suficientemente reactivo y demasiado indulgente con los perpetradores que pueden seguir ejerciendo su poder violento. Esto es precisamente lo que puede empujar a una mujer desesperada a matar para sobrevivir, indicó a AFP la abogada de Valérie, Janie Bonaggiunta.