Discriminación
La sobrecargo y actriz Alba Nevado denuncia discriminación de la agencia Best Way
La sobrecargo y actriz Alba Nevado, quien denunció discriminación por parte de la agencia Best Way, pues tras contratarla para el Fitur en Madrid, España, al día siguiente la despidió por su talla y peso.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- “No me había sentido así de mal, así de juzgada y así de rechazada desde hace muchísimo tiempo”, contó, entre sollozos, la sobrecargo y actriz Alba Nevado, quien denunció discriminación por parte de la agencia Best Way, pues tras contratarla para el Fitur en Madrid, España, al día siguiente la despidió por su talla y peso.
“Estoy super indignada porque pensé que nunca tuviera que volver a pasar esto. Lo juro”, señaló en un video de 3:25 minutos, publicado en Instagram, donde aclaró que no acostumbra contar su vida en redes sociales, porque se le puede dar “una vuelca de tuerca” e irle en contra, pero esto le parece sumamente injusto y no quisiera que le pasara a nadie más.
“Ojalá y sirva, aunque sea para ayudar a una persona y que no tenga que volver a pasar por esta situación. Porque te sientes una auténtica mierda, cuando tú no tienes el problema. Porque el problema no es tener una talla 46, mi problema es que gente te ofrece un puesto de trabajo, el cual sabe la talla que tengo y no esté preparado para asumir que debe tener un uniforme de esa talla para yo poder trabajar.
“El problema lo tienen ellos, no yo. No me puedes decir que no hay tallas más grandes como más pequeñitos. Debe tener previsión para eso. De verdad que hoy en día sigo sin entender muchísimas cosas.
“Pues bien, esa prenda, hoy se ha convertido en el símbolo de opresión y la nota de corte para saber si entras o no en el cuerpo perfecto. Aparte del dolor y tristeza que siento al haber pasado por esta situación, ahora sólo puedo pensar en si alguna compañera conocida o desconocida ha llegado a pasar por esto”, denunció en Instagram.
¿Qué le hicieron a Alba?
Había firmado un contrato con la agencia de azafatas y congresos Best Way para trabajar del 19 al 23 de mayo como azafata en Fitur; después de la formación y la prueba de antígenos le dieron un uniforme de talla única azul marino que no le quedó porque ella es talla 46.
“Conté ese problema a los jefes y me dijeron que pasara por la mañana, que me podían dar una talla 42”. Al siguiente día del hecho, registrado hace seis días en su cuenta de Instagram, narró que la rechazaron por su talla y peso.
Lo primero que le dijeron al entrar fue: “ah, tú eres la del problema”, como si tener una talla 46, dijo, fuese un problema. Después le dieron un uniforme talla 42, de falda, que evidentemente no le quedó, entonces probaron con un pantalón de hombre que tampoco le quedó.
“Luego me llevan a un cuartito y me dicen que lo sienten mucho pero que me mandan a mi casa porque no puedo trabajar sin uniforme. Como si el problema fuera mío. Que me pagaban la hora. Yo no quiero eso, yo no quiero que me traten como si fuera de problema y como si mi imagen solo fuera lo que sirviera para trabajar en un puesto que sé que soy lo suficientemente válida como para estar, pero como no encajo en el canon de belleza que hoy tenemos, pues no tienen una talla para mi y, por lo tanto, no puedo trabajar”, apuntó.