Internacional
Castores dejan sin internet y televisión por cable a medio pueblo
Una familia de roedores robó cables de fibra óptica en una pequeña población de Canadá, lo que provocó la caída de la red local de telecomunicaciones.CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Alrededor de 900 clientes de internet se quedaron sin el servicio durante 36 horas debido a que una familia de castores cortó los cables de la fibra óptica, en su búsqueda de materiales para construir su casa, en el municipio Tumbler Ridge, al noreste de la Columbia Británica en Canadá.
También afectó el servicio de televisión por cable de 60 clientes y afectó la red de telefonía móvil local, informó Canadian Broadcasting Corporatiom el domingo 25
En un comunicado, el portavoz del proveedor del servicio de telecomunicaciones Telus, Liz Sauvé, describió la situación como una “interrupción exclusivamente canadiense”, en ese pequeño pueblo donde viven alrededor de 2 mil personas.
“Los castores han mordido nuestro cable de fibra en múltiples puntos, causando grandes daños. Nuestro equipo localizó una presa cercana y parece que los castores cavaron bajo tierra a lo largo del arroyo para llegar a nuestro cable, que está enterrado a unos tres pies bajo tierra y protegido por un conducto de 4.5 pulgadas de espesor. Los castores primero masticaron el conducto antes de masticar el cable en varios cables en varios lugares”.
El servicio quedó reestablecido el domingo 25 de abril a las 6:30 de la tarde, después de trabajar “las veinticuatro horas del día” para determinar hasta dónde estaban dañados los cables, indicó Sauvé.
Telus incorporó equipos y técnicos adicionales para hacer frente a “condiciones desafiantes” debido a que el suelo sobre el cable está parcialmente congelado en esta época del año.
Una foto tomada del sitio muestra que los castores usaron cinta de marcado de fibra, generalmente enterrada bajo tierra, como parte de su presa, informó CBC.
Telus mencionó que estaba, como empresa, “muy apenada por esta interrupción”, pero lo tomó con humor al considerar el hecho como “un giro de los acontecimientos muy inusual y exclusivamente canadiense.”