CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Un juez de la Corte Suprema de Brasil anuló todas las condenas por corrupción del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010). Recupera así el derecho de presentarse en la elección presidencial de 2022, informaron EFE, AFP y Clarín.

Con esta decisión, los casos de la operación anticorrupción “Lava Jato” relacionados con Lula serán evaluados desde cero por la Corte de Distrito Federal, en Brasilia, que determinará si los tres casos pueden ser validados y reutilizados.

Mientras tanto, Lula da Silva recuperó sus derechos políticos.

El juez Edson Fachin de la Suprema Corte Federal de Brasil consideró que el Juzgado Federal en Paraná no debió juzgar al expresidente porque no había relación entre las denuncias en Petrobras.

Previó cierta parcialidad de la Fiscalía y del exjuez y exministro Sergio Moro en estos casos.

El juez consideró incompetente en los casos del triplex Guarujá, el sitio Atibaia y donaciones al instituto Lula. Dijo que el funcionario del 13 Juzgado Federal de Curitiba no era el natural para atender los casos.

“Con la decisión se declararon nulas todas las decisiones dictadas por el Juzgado 13 Federal de Cubritiba y se declaró la remisión de los respectivos expedientes a la Sección Judicial del Distrito Federal”, señaló el texto de la nota de prensa del ministro, de acuerdo con el portal www.minutouno.com

“La decisión monocrática de Fachin, un juez conocido por haberse alineado a las denuncias y casos impulsados por la Operación ‘Lava Jato’ se produjo luego del escándalo generado por la filtración de mensajes que desnudaron lo que Lula y el PT siempre denunciaron: el trabajo conjunto y secreto de los fiscales y el entonces juez Moro para condenar al exmandatario antes de que pudiera competir en las últimas elecciones presidenciales”, informó Clarín.

Lula da Silva pasó 580 días presos en la ciudad de Curitiba, capital del estado de Paraná, después de ser detenido en un operativo difundido en todo el mundo, por lo que tuvo que abandonar sus aspiraciones presidenciales.

Tiempo después, el juez Moro se convirtió en el primer ministro de Justicia del actual presidente Jair Bolsonaro.

El “Lava Jato”

El 17 de marzo de 2014, una rutinaria revisión al azar de una gasolinera en Brasilia abrió una operación de lavado de dinero, y corrupción de dimensiones continentales. Fue un escándalo que salpicó a Petrobras y a Odebrecht.

Se destapó una gran red de corrupción que condujo a prisión a poderosos ejecutivos y políticos, pero el arresto más mediático fue el de Lula da Silva, quien estuvo preso 1 año y 7 meses en la Policía Federal en Curitiba, capital de Paraná.

El escándalo internacional es conocido como el “caso Odebrecht” pues resultó en una trama de corrupción internacional que involucró a presidentes y expresidentes de América Latina y funcionarios gubernamentales que aceptaron sobornos a cambio de beneficiar a Odebrecht.

En el caso del “Lava Jato”, las sospechas se descubrieron por unos reportajes del portal The Intercept Brasil que publicó mensajes entre los fiscales de la “Lava Jato” y el juez Sergio Moro, que pusieron en tela de juicio la imparcialidad de los fiscales y que Moro había coordinado las acciones que encarcelaron a Lula da Silva por corrupción.

En sus redes sociales, Lula escribió: “La decisión que hoy afirma la incompetencia de la Justicia Federal de Curitiba es el reconocimiento de que siempre hemos tenido razón en esta batalla legal”.

“Celebro que @LulaOficial haya sido rehabilitado en todos sus derechos políticos. Se anularon las condenas en su contra que fueron dictadas con el solo fin de perseguirlo y eliminarlo de la carrera política. ¡Se hizo justicia!”, escribió el presidente de Argentina, Alberto Fernández, en sus redes sociales.