MADRID (EUROPA PRESS).- Las víctimas de las masacres de Sacaba y Senkata, en las que murieron una veintena de personas durante la represión de las fuerzas de seguridad tras la crisis electoral en 2019, amenazaron este viernes con una huelga de hambre si el gobierno no escucha todas sus peticiones.

El representante de las víctimas, David Inca, anunció que si la administración no cierra los puntos que quedan abiertos sobre su pliego de peticiones en la reunión que se celebrará este mismo viernes, se declararán en huelga de hambre.

La declaración de Inca se produce después de que se conociera que la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, no estará en el encuentro. En total, quedan abiertas tres de las 22 demandas que el grupo de víctimas presentó a su llegada a la Paz tras una marcha que partió desde la localidad de Caracollo.

Las demandas a las que el gobierno todavía no ha dado respuesta se refieren a la explicación de los procesos iniciados contra la expresidenta interina Jeanine Áñez y otras autoridades implicadas en los incidentes, el decreto para el acceso a créditos para las víctimas y el plan de reparación integral, recuerda 'La Razón'.

Durante las semanas que siguieron la renuncia de Morales y a la autoproclamación de Áñez como presidenta interina, se produjeron fuertes protestas y movilizaciones contra estos dos episodios, con las masacres de Sacaba, en La Paz, y Senkata, en El Alto, como episodios más funestos.