MADRID (apro).- Corinna Larsen asegura ser objeto de una campaña de acoso desde que se destapó su relación con el entonces rey Juan Carlos I, tras el accidente de éste en el viaje de caza en Botswana en 2012. Y aseguró que es posible que el monarca tenga cientos de cuentas bancarias opacas en otros países, como la que permitió iniciar una investigación por parte de la fiscalía en Suiza y la que inició la fiscalía del
Tribunal Supremo español.
En una entrevista con la cadena británica BBC, Corinna Larsen sostiene: “Presionarme con eso no es la forma correcta de seguir adelante, porque creo, en ese caso, todos tienen que devolverlo todo. Lo que me parece extraordinario es que estén convirtiendo 40 años de modus operandi de una empresa familiar en un foco sobre una persona. Y esa persona soy yo… porque habrá cientos de cuentas en otras jurisdicciones”.
Las revelaciones de la examante del monarca se conocen tres días después que la Casa Real española diera a conocer que el rey emérito Juan Carlos de Borbón se encuentra en Emiratos Árabes Unidos, en medio de una serie de especulaciones tras su salida de España, el 4 de agosto.
La empresaria y lobista está citada a declarar como imputada ante el juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, por el caso de los audios grabados subrepticiamente por el excomisario de policía, José Manuel Villarejo, en unas conversaciones celebradas en Londres, donde ella habló por primera ocasión sobre el cobro de comisiones por parte del rey de España que forman una fortuna opaca en países considerados paraísos fiscales.
En 2012, tras el escándalo por el viaje a Botswana, el rey le hizo un “regalo no solicitado” en forma de donación para ella y su hijo por alrededor de 100 millones de dólares, provenientes de las supuestas comisiones cobradas por el monarca por mediar en la concesión de la obra del tren de alta velocidad, AVE, entre las ciudades saudíes de Medina y La Meca.
Insiste que esa transferencia de 100 millones de dólares que presuntamente le hizo el monarca procedente de la cuenta bancaria en Suiza de la Fundación Lucum, radicada en Panamá, fue un regalo “en gratitud por haberle cuidado durante sus peores momentos”
La empresaria sostiene que “en 2014, hizo intentos desesperados para que volviera con él”, pero cuando “se dio cuenta de que no iba a volver y se puso completamente furioso, pidió que le devolviera todo. Creo que solo fue un berrinche”
El fiscal suizo Yves Bertossa cree que los millones transferidos desde la cuenta de la Fundación Lucum a otra de Corinna Larsen en 2012 proceden del dinero que recibió Juan Carlos I de una comisión por la construcción del AVE a la Meca, en 2008.
Preguntada por si cree que deberá devolver ese dinero, la empresaria responde que “eso se lo dejaría al fiscal suizo”, quien la mantiene imputada junto con el gestor de los fondos, Arturo Fasana y el abogado Dante Canónica, acusados éstos de un delito de “blanqueo agravado de capitales”.
Corinna Larsen sostiene en esa entrevista que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) español es quien está detrás de la campaña de “acoso” para dirigir contra ella las informaciones sobre el dinero opaco del rey emérito.
Sostiene que le pidieron que no hiciera declaraciones y, según afirma, el extitular del CNI, el general Félix Sanz Roldan le habría amenazado, cosa que el militar negó en una declaración, bajo juramento, ante un juez.