MADRID (EUROPA PRESS).- Un hombre irrumpió con su vehículo en una manifestación en memoria de George Floyd celebrada el domingo por la noche en la ciudad de Seattle, en el noroeste de Estados Unidos, y disparó contra uno de los manifestantes al intentar cortarle el paso, según el diario local 'Seattle Times'.
El rotativo difundió un vídeo en el que se puede ver al hombre circulando con su coche entre manifestantes hasta que varios de ellos le cortan el paso. En ese momento, desde el interior del vehículo, el hombre, que viste unos vaqueros azules, una sudadera negra y una gorra del mismo color, disparo con su pistola y abandonó el vehículo.
El manifestante al que agredió, un hombre negro, quedó tirado en el suelo y el autor del disparo salió corriendo, siendo perseguido por varios manifestantes. El hombre cruzó toda la manifestación hasta aproximarse a la
Policía, que lo detuvo.
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Los manifestantes contaron que el hombre irrumpió con su vehículo en la zona de la protesta y que varios de los manifestantes empezaron a gritarle e intentaron cortarle el paso, situándose uno de ellos con unas placas metálicas frente al coche para obligarle a parar.
Quise proteger a la gente, dice el hombre herido
"Creía que iba a seguir hacia adelante contra la multitud", ha contado B.J. Hayes, uno de los manifestantes, que ha participado además en varias protestas recientes por la muerte de George Floyd, el ciudadano negro que murió a manos de la Policía en Minneapolis el 25 de mayo. "Pensé por completo que iba a ver un montón de cadáveres volando", aseguró.
El hombre que fue alcanzado por un disparo realizado por el conductor estaba situado junto al lateral del coche y cayó desplomado después de que el hombre saliera del vehículo amenazando con su arma a las personas que se encontraba a su paso.
Varias personas y trabajadores sanitarios atendieron a la víctima del disparo, que finalmente ha salido a pie ayudado por varios facultativos para recibir atención médica en una ambulancia. "He escuchado el disparo alcanzándome el brazo. Todo lo que quería hacer era proteger a esas personas", dijo el hombre herido mientras avanzaba hacia la ambulancia con la ayuda de varios sanitarios y manifestantes.
El incidente en la manifestación del domingo por la noche en Seattle recordó lo sucedido el 12 de agosto de 2017 en la ciudad de Charlottesville, en el estado de Virginia, donde un joven blanco de ideología neonazi mató a una manifestante, Heather Heayer, e hirió a otros 35 tras embestirlos con su coche durante una protesta antirracista.
El autor del atropello múltiple, James Fields, fue condenado a cadena perpetua tras llegar a un acuerdo con el fiscal por el que se declaró culpable de 29 cargos de delitos de odio y la Fiscalía retiró la petición de pena de muerte.
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