Murió 'Popeye”, exjefe de sicarios de Pablo Escobar
RAFAEL CRODA BOGOTÁ (apro).- El exjefe de sicarios del narcotraficante Pablo Escobar, John Jairo Velásquez Vásquez, “Popeye”, murió este jueves a los 58 años de edad en un hospital de Bogotá por un cáncer de esófago.
“Popeye”, quien reconocía la autoría de unos 200 homicidios, era uno de pocos sobrevivientes de la estructura original del Cártel de Medellín y era testigo de varios hechos criminales que marcaron a Colombia hace tres décadas, como el homicidio del líder liberal Luis Carlos Galán y el atentado a un avión de Avianca, en el que murieron 107 personas, ambos ocurridos en 1989.
El expistolero de Escobar se encontraba detenido desde mayo de 2018 por el delito de extorsión. Antes, había pasado 23 años en prisión purgando 13 condenas por homicidio, asociación para delinquir y narcotráfico.
“Popeye” se encontraba hospitalizado en el Instituto Nacional de Cancerología de Bogotá desde el pasado 31 de diciembre, donde falleció esta madrugada. El cáncer ya le había hecho metástasis en los pulmones, el hígado y el estómago y en las últimas semanas había recibido cuidados paliativos.
“Popeye” fue uno de los hombres más cercanos a Escobar y uno de los sicarios del Cártel de Medellín con mayor figuración pública.
En una entrevista con Proceso hace cinco años, cuando estaba preso en la cárcel de Cómbita, contó que a finales del 80 viajó a México para “cuadrar” un cargamento de cocaína con Amado Carrillo Fuentes, “El señor de los cielos”.
De acuerdo con “Popeye”, Carrillo Fuentes quedó debiendo a Escobar 10 millones de dólares que nunca le pagó.
“Y el ‘Patrón’ (como llamaba a Escobar) sabía que no podía ir a México a hacerle una guerra a ‘El señor de los cielos’”, aseguró.