CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Las autoridades francesas de cultura alertaron sobre la urgencia de reiniciar las labores de reconstrucción de la catedral de Nortre Dame suspendidas el pasado 25 de julio por temores a las exposición de los trabajadores a residuos de plomo. Y es que, según el Ministerio de Cultura francés, la reciente ola de calor que azotó a Francia ha provocado la caída de piedras de las bóvedas de las naves de la catedral y sigue el riesgo de que se derrumbe. El ministerio subrayó la necesidad “urgente” de retomar las obras para consolidar la estructura de la catedral.

“Recientemente se han producido nuevas caídas de piedras de las bóvedas de las naves tras la ola de calor» de finales de julio, señaló el ministerio de la Cultura en declaraciones a la agencia AFP.

La semana pasada, autoridades locales informaron que las obras que debían reanudarse la próxima semana, arrancarán el 19 de agosto, siempre y cuando se garantice que se cumplen “plenamente” los requisitos de seguridad.

“Las recomendaciones de la inspección de trabajo ya han sido en gran parte tomadas en cuenta y serán aplicadas durante todo el proceso de restauración”, respondió a esa inquietud el ministerio de Cultura este miércoles.

El ministerio justificó además el ritmo de trabajo de las obras emprendidas el 16 de abril, al día siguiente del incendio que provocó la caída de la torre conocida como “la aguja”, impuesto por la “urgencia” ante el riesgo persistente de colapso de la catedral milenaria. El incendio de la catedral, el 15 de abril, provocó que varias toneladas de plomo contenidas en la aguja y el techo del edificio se fundieran y se dispersaran en forma de partículas en la atmósfera. Casi cuatro meses después, este martes 13, las autoridades iniciaron labores para limpiar el plomo en los alrededores de Notre Dame, una medida tomada “demasiado tarde según” los críticos. Dos escuelas cercanas a la catedral fueron cerradas luego que se detectaron niveles peligrosos de plomo. Dichos establecimientos acogían a 180 niños para cursos de verano. Y las autoridades sanitarias han aconsejado que la gente expuesta a más de 70 microgramos de plomo, un nivel que se sobrepasó en parte del centro de París después del incendio, se sometan a análisis de sangre. De acuerdo con un avance de la investigación dado a conocer en junio pasado por la Fiscalía francesa, un cigarrillo mal apagado o un cortocircuito habrían causado el incendio que destruyó parte de la catedral de Notre Dame.