PARÍS (apro).- A tres días del incendio que destruyó gran parte del techo y la flecha de la Catedral Notre-Dame de París, el gobierno anunció el lanzamiento de un concurso arquitectónico para la reconstrucción del monumento. ¿Cómo será el nuevo rostro de la Catedral? El Primer ministro anunció la creación de “un concurso internacional de arquitectura sobre la reconstrucción de la flecha de la Catedral”, para pensar la forma del nuevo templo. De cara a las Olimpiadas de 2024, el presidente Macron había declarado el martes que quería que la Catedral fuera reconstruida “más bella que antes” y  “que sea acabada en cinco años”, aunque la mayoría de los expertos consideran que se necesitarán al menos diez años para renovarla.   ¿Idéntica, o moderna? El debate principal reside en saber si se tiene que renovar la Catedral al igual que parecía hace apenas tres días, o si se tiene que imaginar un diseño nuevo y moderno. El presidente desea “un gesto arquitectónico contemporáneo”. Su esposa, Brigitte Macron, declaró después de una misa en la iglesia del Saint-Sulpice, donde se mudara el obispado, que la Catedral “revivirá aún mejor, tal vez más alto”. Muchos quieren ver la misma Catedral que antes. “Es un monumento inscrito en el tiempo. No puedo imaginar una flecha que no tendrá nada que ver con la que ha sido construida”, confesó en el canal France Info Jean-Marie Henriquet, descendiente de Eugène Viollet-le-Duc, el arquitecto de la flecha.

"No veo la flecha ser objeto de innovación. (...) Es posible construir una flecha del mismo calibre con materiales menos pesados pero igual de resistentes”, dijo.

Otros, consideran que sería una falta de respeto tratar de imitar a dicha obra arquitectónica. Hacer “un pastiche” de la flecha original del siglo XIX imaginada por Viollet-le-Duc, sería algo “grotesco”, dijo Jean-Michel Wilmotte, quien tomará parte en el concurso de arquitectura y considera que se tienen que utilizar materiales de nuestra época.

“En cristal, sería absolutamente extraordinario. Vidrio puro, vidrio blanco, con una estructura metálica que brillaría”, imaginó.

Mientras empiezan a declararse los candidatos, este jueves fue un día en honor a los bomberos, pues 300 de los que trabajaron para apagar el fuego fueron recibidos por el presidente Macron, en su palacio del Elíseo. En la tarde, fueron aplaudidos durante varios minutos por miles de parisinos reunidos frente al Ayuntamiento, a unos cuatrocientos metros de la Catedral, del otro lado del río Sena.