MADRID (proceso.com.mx).- El expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, fue detenido este domingo por la mañana cuando cruzó en coche la frontera alemana desde Dinamarca, en cumplimiento de una euroorden de detención con fines de extradición reactivada el viernes por el Tribunal Supremo, que procesó a los líderes del proceso secesionista. La captura fue confirmada por el gobierno de Alemania a España después de las 11:17 (hora española), cuando el vehículo fue detenido en una gasolinera en la localidad alemana de Schuby, a 30 kilómetros de la frontera con Dinamarca. Puigdemont viajó a Finlandia para participar en un acto, donde el viernes se enteró que, tras ordenar prisión sin fianza contra cinco líderes independentistas, el magistrado de Supremo, Pablo Llarena, reactivó la euroorden de captura en su contra. Fue entonces que cambió su itinerario, prescindió de su regreso a su actual residencia en Bélgica por vía aérea como lo tenía programado e hizo el recorrido primero por ferry a Suecia y después por tierra, sin embargo, el servicio de inteligencia español, Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en coordinación con la Policía Nacional le dieron seguimiento y se pusieron en contacto con la Oficina Federal de Investigación Criminal de Alemania (BKA), según la investigación. El líder independentista viajaba con cuatro personas de las que aún se desconoce su identidad. Puigdemont ya se encuentra en una comisaría de Alemania y estará a disposición de la fiscalía. Según los medios españoles, Alemania podría ser más favorable para la entrega de Puigdemont a España, a diferencia de Bélgica y de Suiza, que se han mostrado más reacios con las solicitudes de detención con fines de extradición. El proceso de entrega a España podría producirse entre 60 y 90 días, una vez que el país peninsular cumpla con todo el procedimiento para que se produzca la extradición. Tras el referéndum del 1 de octubre pasado y la sesión del día 27 de ese mismo mes, donde no consiguieron declarar unilateralmente la independencia, Puigdemont huyó a Bruselas, donde permanecía desde entonces. Por su parte, en Bruselas la fiscalía también reactivó las euroórdenes de detención de los exconsejeros que acompañaron a Puigdemont a Bruselas, Toni Comín, Meritxell Serret y Lluís Puig.