Denis Mukwege y Nadia Murad, Premio Nobel de la Paz por su lucha contra la violencia sexual
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Denis Mukwege, un ginecólogo que cura a mujeres violadas en la República Democrática del Congo (RDC), y la activista iraquí de origen yazidí Nadia Murad, de 25 años, quien fue esclava del grupo yihadista Estado Islámico, fueron galardonados con el Premio Nobel de la Paz 2018.
El Comité Noruego les concedió el galardón por su labor en la lucha contra la violencia sexual. Además, recibieron el Premio Sajárov que concede el Parlamento Europeo.
"Nadia Murad es la testigo que habla de los abusos cometidos contra ella y otros. Ella ha demostrado un valor extraordinario al relatar sus propios sufrimientos y hablar en nombre de otras víctimas", señaló el Comité Nobel.
Murad vivía con su madre y sus 12 hermanos en el pueblo de Kojo, al norte de Irak, cuando el 3 de agosto de 2014 llegaron los soldados del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés), la secuestraron y la vendieron como esclava sexual.
La joven logró escapar en noviembre del mismo año con ayuda de los vecinos y acabó en un campo de refugiados de Irak. Después se trasladó a Alemania.
Por su parte, el médico Denis Mukwege, de 63 años, ha pasado gran parte de su vida ayudando a las víctimas de violencia sexual en la República Democrática del Congo.
En 1999, gracias al apoyo de las organizaciones de ayuda internacional, fundó el hospital de Panzi, en la ciudad de Bukavu, al este del país. Como cirujano jefe de este centro, él y su equipo han intervenido a más de 40 mil mujeres violadas y víctimas de la ablación.
"El doctor Mukwege ha condenado repetidamente la impunidad por violaciones masivas y ha criticado al gobierno congoleño y a otros países por no hacer lo suficiente para detener el uso de la violencia sexual contra las mujeres como estrategia y arma de guerra", subrayó el Comité Noruego.
En octubre de 2012 Mukwege sufrió un atentado en el que murió uno de sus colaboradores, justo un mes después de haber dado un discurso en la ONU en el que pedía a la organización una "condena unánime" contra los grupos rebeldes "responsables de actos de violencia sexual".
Para la edición de este año se habían presentado 331 candidaturas, entre ellas la de los presidentes de Estados Unidos, Donald Trum, y el de Corea del Norte, Kim Jong Un.
De los 331 aspirantes, 216 correspondían a personas y 115 a grupos u organizaciones, según el Comité. También es la segunda mayor cifra de la historia tras la edición de 2016.
El año pasado, el Premio Nobel de la Paz correspondió a la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares, (ICAN, por sus siglas en inglés) un grupo que reúne a unas 460 ONG de alrededor de 100 países. El premio llegó justo en un momento de tensión por el desafío nuclear de Corea del Norte y las sombras sobre la salida de Estados Unidos del acuerdo atómico con Irán a cambio de levantar sanciones al país persa. Finalmente, Washington acabó retirándose del histórico pacto.