Masacre en Kenia: Ataque islamista a universidad deja 147 estudiantes muertos
MÉXICO, D.F. (apro).- A las 5:30 de la madrugada de este jueves en Kenia, alumnos cristianos y musulmanes de la Universidad de Garissa --ciudad ubicada al este del país y a menos de 200 kilómetros de la frontera con Somalia--, iniciaban sus oraciones cuando un grupo fuertemente armado y encapuchado ingresó a las instalaciones académicas y empezó una masacre que duró 16 horas y dejó al menos 147 muertos.
Los integrantes del comando armado reivindicaron su pertenencia a la milicia somalí de al-Shabbaab (Los Jóvenes, en español), la cual se avasalló a Al-Qaeda en 2012.
La página de internet del diario keniano Standard recordó que hoy se cumplió un año del asesinato de Sheik Abubakar Sharif, el supuesto cerebro del grupo armado somalí, por lo que agentes de inteligencia de Kenia sospechan que la agresión fue un acto de venganza.
Además de las víctimas mortales, autoridades del gobierno keniano reportaron más de 79 heridos, en lo que a la fecha se convirtió en el ataque más mortífero de la milicia de ese país.
El atentado ocurrió más de un año después del asalto al centro comercial de Westgate en la capital, Nairobi, que terminó con un saldo de 67 muertos.
Según el mismo rotativo, las autoridades de Kenia sospechan que el predicador radical musulmán Mohamed Kuno Dulyadeen está detrás de la masacre. Originario de Kenia, se trasladó de Garissa hacia Somalia hace 10 años con el fin de integrarse a la Unión de Cortes Islámicas.
La matanza de esta mañana comenzó cuando el grupo armado entró a las instalaciones de la Universidad de Garissa y ejecutó a dos guardias de seguridad. Enseguida se dirigió hacia los dormitorios de los estudiantes.
Al entrar, los agresores dispararon de manera “indiscriminada sobre todos” y capturaron rehenes. Uno de ellos, reportó Standard, pudo llamar a sus familiares y les dijo: “estos hombres están alegres, como si matar fuera su único objetivo”. Luego se cortó la comunicación.
En reacción, el presidente Uhuru Keniatta declaró: “Hemos sufrido de manera innecesaria debido a los recortes en los rangos del personal de seguridad”. Enseguida, declaró que se formarán 10 mil policías adicionales.
En un comunicado, la Cancillería mexicana condenó “el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, al tiempo que transmite sus condolencias al pueblo y gobierno de Kenia así como a los familiares de las víctimas”.