Washington impone nuevas trabas para visas de Medio Oriente
MÉXICO, DF (apro).- El jueves 11 el poeta iraní exiliado en México Mohsen Emadi se disponía a viajar a Estados Unidos para conmemorar el 90 aniversario del nacimiento del mejor poeta persa del siglo XX, Ahmad Samlou.
Además de ser alumno de Shamlou (a quien califica como un “poeta de la libertad” y quien ha sido vetado durante más de 10 años por la república islámica de Irán), Emadi es también el traductor al persa del legendario poeta neoyorquino Walt Withman.
Al poeta iraní sólo le faltaba que la embajada estadunidense en México le extendiera su visa por los días que duraba la conferencia, tal y como lo había hecho en febrero del año pasado, cuando recibió la extensión en menos de 20 días.
Emadi, quien participó en las protestas del movimiento verde en 2009, leyó en 2014 su poesía en inglés en Washington durante la conferencia The Writing Problem, organizada por la asociación American Writer y la Universidad de Washington que dedicó un panel a su trabajo poético, por lo que nunca pensó que tuviera problemas en el futuro.
Sin embargo, el pasado 11 de diciembre encontró en su correo un mensaje que decía: “Se necesita que se presente a una segunda visita” a pesar de que había enviado la invitación al evento y una copia de su boleto de avión con un mes de anticipación.
Emadi no pudo asistir al evento conmemorativo. Envió su ponencia grabada y recibió el apoyo de poetas estadunidenses. Aun así, decidió ir a la segunda entrevista para entender por qué la embajada había entorpecido su viaje.
Los funcionarios no le dieron explicaciones. Sólo se disculparon.
"Yo les decía: todo tiene relación con los cambios nuevos de política de ustedes. Se quedaban callados. No decían que sí ni que no", cuenta a Apro.
El poeta denuncia que si trabas burocráticas afectan a escritores en el exilio, como él, la situación es mucho más difícil para quienes huyen sin papeles de países en guerra, e incluso para quienes sólo han visitado Medio Oriente de manera reciente.
Y es que a pesar de las declaraciones del presidente Barack Obama de que Estados Unidos debe abrirse a refugiados principalmente de Siria, la Cámara de Representantes tiene un proyecto de ley que entorpecería la entrada a Estados Unidos de personas de los 38 países que forman parte del Programa de Exención de Visa (incluidos varios europeos, Australia, Nueva Zelanda y Japón) que tengan doble nacionalidad con Irán, Siria, Irak, Sudán; e incluso que hayan viajado en los últimos cinco años a estos países.
El 5 de diciembre, la ley, llamada Acta de Reforzamiento al Programa de Seguridad en la Exención de Visas fue votada por una aplastante mayoría de 407 a 19.
La propuesta avanzará ahora al Senado y se coloca en el contexto de los ataques de París y San Bernardino, California (perpetuado por personas de origen paquistaní y que viajaron a Arabia Saudita) y podría ser aprobada los últimos días del año, como resalta el diario británico The Guardian en una nota del 8 de diciembre titulada “Cámara pasa legislación que endurece restricciones de visa con fuerte mayoría”.
Además, la iniciativa daría a Estados Unidos herramientas para remover países del programa si no cooperan con el reforzamiento de leyes contra el terrorismo y las labores de inteligencia.
Inicialmente, la propuesta de ley aplicaba sólo para Siria e Irak, pero la versión final incluye a Irán y finalmente a Sudán por supuestamente ser "promotores del terrorismo", de acuerdo con una nota difundida por la cadena BBC de Londres.
La noticia ha generado una amplia respuesta de iraníes estadunidenses en medios de comunicación. Ya hay en Facebook páginas dedicadas a protestar contra la medida y se creó la cuenta @StopHR158, que hace referencia al número oficial de la propuesta.
En el texto “Americanos iraníes usados otra vez como chivo expiatorio”, publicado por The Guardian el 10 de diciembre, el profesor de sociología iraní Ahmad Sadri recalca que ningún iraní ha sufrido condena por terrorismo. Cuestiona por qué países como Arabia Saudita y Paquistán no se encuentran en la lista cuando los dos aportaron la mayor parte de atacantes el 11 de septiembre del 2001, o incluso Turquía, país que ha sido paso regular del Estado Islámico (EI).
Una señal de cambio
Robert Mac Caw, miembro del Consejo de Relaciones Islámico-Americanas (CAIR, por sus siglas en inglés), cuenta Apro que los casos como el de Emadi y otros tantos musulmanes que no pueden entrar por diversas razones son parte de un "problema mayúsculo" de endurecimiento de las leyes de refugio y visita a Estados Unidos.
Igualmente, especifica que esta ley se hermana con las propuestas que frenarían refugiados de Irak y Siria y no es una "alternativa" como lo propusieron sus autores, Dianne Feinstein, una demócrata de California, y Jeff Flake, un republicano de Arizona.
Especifica que aunque la ley todavía no es promulgada, "puede crear antecedentes para la repatriación, por lo que cada individuo que entra a Estados Unidos corre peligro".
Subraya: "Esta ley automáticamente castiga a trabajadores humanitarios, voluntarios, investigadores y universitarios, arqueólogos".
CAIR envió el 4 de diciembre, junto a otras 15 organizaciones --entre ellas Human Rights Watch y Veteranos de Irak en Contra de la Guerra--, una carta a la Cámara de Representantes para mostrar su preocupación por la propuesta.
La misiva invita al Senado a remover cláusulas que específicamente se dirigen a personas que hayan visitado estos países y explica que la medida no será efectiva porque está a expensas del rastreo de personas que regularmente se reportan.
También advierte que las personas que intentan involucrarse en actividades terroristas no tienen sus pasaportes estampados y que también afectaría a clérigos, periodistas u traductores, quienes visitan familias, "penalizándolos por su honestidad".
Ofrece como prueba la creación en 2002 del Sistema de Registro de Seguridad Nacional de Entradas y Salidas (NSEERS, por siglas en inglés), que requería registro y escrutinio de personas árabes. Ninguna condena se ha realizado bajo este programa y finalmente fue suspendido en 2011.
"La propuesta tiene como premisa la presunción de que las personas de estos países tienen más posibilidades de cometer actos terroristas y hace a cualquiera que visite estos países automáticamente sospechoso de terrorismo", dice la carta, a la cual tuvo acceso Apro.
Mohsen Emadi ve esta medida como“una señal de un cambio que va a pasar muy rápido y que significa que hay un tipo de acuerdo para hacer esto político".
El poeta recalca la coincidencia de la crisis de refugiados en Europa, los atentados de París con este tipo de medidas y califica la retórica del presidente francés Francois Hollande parecida a la del expresidente estadunidense George W. Bush despuésde los ataques del 11 de septiembre. Esto podría, dice, acarrear más islamofobia y resistencia de personas de los cuatro países en contra de ella.
El pasado 14 de diciembre Emadi descubrió que una traducción suya de Walt Withman al persa se encontraba en la página del órgano consular de Estados Unidos en Irán:
"Necesitan mis traducciones, pero no me necesitan a mí", observa.