CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Noviembre no fue un buen mes para el comercio exterior del país, puesto que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y con series ajustadas por estacionalidad, en noviembre las exportaciones totales se contrajeron 1.62% mensual, con un total de 50 mil 250 millones de dólares, su mayor caída desde abril.

En lo que corresponde a las exportaciones petroleras, éstas declinaron 17.39% y las no petroleras 0.57%.

A su vez, entre las exportaciones no petroleras, las manufactureras se contrajeron 0.45% mensual, debido a que las automotrices se contrajeron 6.38%. En tanto, el componente del resto de manufacturas registró un crecimiento mensual de 3.22%, luego de dos meses de caídas consecutivas.

Del lado de las importaciones, éstas se contrajeron 1.20%, cayendo por dos meses consecutivos, observándose un deterioro mensual en los tres componentes:

Las compras de bienes intermedios que realizó el país cayeron 1.38%, bajando por segundo mes consecutivo, señal de un menor flujo de bienes destinados a la producción de otras manufacturas. Mientras que los bienes de consumo cayeron 1.08%, bajando por segundo mes consecutivo, en tanto que los bienes de capital retrocedieron 0.03%, cayendo también por segundo mes consecutivo.

En el undécimo mes del año, el superávit de la balanza comercial del país se contrajo desde 242 millones de dólares hasta 30 millones, prácticamente en equilibrio y sin ejercer demasiadas presiones sobre el panorama que enfrenta la economía abierta mexicana.

De acuerdo con el análisis del Grupo Financiero Monex, las cifras de noviembre reflejan la inercia de los menores precios de los energéticos a nivel global, pues tanto las exportaciones como las importaciones petroleras cayeron en órdenes de magnitud distintos a los de sus contrapartes no petroleras.

Los crudos de referencia se habían visto afectados al cierre del tercer trimestre por la reducción en la producción de ciertos países de la OPEP y por el estallido de la guerra entre Israel y Hamás, pero lograron reponerse en noviembre, y aunque no volvieron a los mínimos del año si tuvieron un descenso de 10.51% que arrastró a la baja a los componentes de la balanza.

Además de las distorsiones ocasionadas por los precios del petróleo, también se hizo notar la parálisis en el sector automotriz a raíz de la huelga de la UAW en Estados Unidos.

Las exportaciones de este sector bajaron 6.38% mensual hasta alcanzar su menor nivel de los últimos cinco meses.