CIUDAD DE MÉXICO (apro).—La inflación continuó al alza durante la primera quincena de octubre al registrar una tasa anual de 6.12%, cifra que se aleja más de la meta planteada por el Banco de México (Banxico) que es del 3% (+/- un punto porcentual).

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al interior del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), la inflación subyacente se elevó 0.33% en el periodo referido, para situarse en una tasa anual de 5.12%.

La inflación subyacente se obtiene al eliminar del cálculo del INPC los bienes y servicios cuyos precios son más volátiles, o bien que su proceso de determinación no responde a condiciones de mercado.

Por su parte, la inflación no subyacente, conformada por productos agropecuarios y, energéticos y tarifas autorizadas por distintos órdenes de gobierno creció 1.18%, colocándose en una tasa anual de 9.21%.

En los primeros 15 días de octubre, los precios que más aumentaron fueron los de la electricidad en 18.80%; los nopales, en 15.11%; el transporte aéreo, 11.38% y en menor medida los costos de la cebolla, el gas doméstico LP,  los servicios turísticos en paquete, automóviles, los servicios profesionales y la vivienda propia.

En contraste, disminuyeron los costos del jitomate, la naranja, el pollo, aguacate, limón, ejotes, calabacitas, crema para la piel, así como la gasolina de bajo octanaje.

De acuerdo con el análisis del Grupo Financiero Monex, independientemente de los causantes, las tasas elevadas de inflación se han vuelto una constante en 2021.  La variación quincenal promedio del año se sitúa en 0.28% y es la más alta desde 2000.

“Las disrupciones en las cadenas de suministros y las presiones del lado de la demanda aún no se han despejado y de acuerdo con los comentarios de los distintos actores de los sectores afectados se espera que la situación pueda comenzar a normalizarse hacia mediados de 2022”, explicó.

Monex agregó que el principal impacto sería para la inflación subyacente, por lo que los avances superiores a 0.40% mensual podrían volverse una constante a lo largo de los próximos meses. Por sí solo, este patrón mantendría a la inflación general arriba de 5.00% anual durante los primeros 8 meses de 2022, pero el avance de los precios sigue siendo vulnerable a distintos impactos.

Incluso, concluyó, en el contexto de la temporada de reportes de los resultados trimestrales de las empresas mexicanas se ha mencionado la posibilidad de un traspaso del incremento en los costos a los precios finales, especialmente en el ramo de las mercancías alimentarias.