GUANAJUATO, Gto. (apro).– General Motors sumó un segundo “paro técnico parcial” en México, esta vez en su planta de Ramos Arizpe, debido al impacto de la huelga que mantienen trabajadores de la empresa en Estados Unidos. Según un comunicado de la empresa, esta decisión impacta a 415 de los aproximadamente 5 mil 400 empleados que laboran en dicha planta, a los cuales se les otorgan días de descanso a cuenta de vacaciones con su pago completo. A quienes no tienen vacaciones disponibles se les otorga un porcentaje de su sueldo. “En cuanto se reanuden las operaciones regulares todos seguirán laborando normalmente”, indicó un funcionario de la empresa. Se explicó que el número de empleados afectados por este paro parcial representan el 7.5 por ciento de la plantilla total de trabajadores. Hace apenas una semana, General Motors anunció que entraría en un “paro técnico” en su complejo de manufactura en Silao, debido a la falta de componentes enviados desde Estados Unidos, específicamente motores. En dicha planta laboran 6 mil trabajadores. En algunos turnos se asignaron periodos vacacionales y en otros se está pagando el 55 por ciento de los salarios. El corporativo explicó que la planta de ensamble donde se producen las camionetas Blazer y Equinox operan de manera regular, lo mismo que ocurre en la planta de motores “que produce el motor CSS con normalidad”. En este comunicado se habla de un “impacto menor a la producción de la planta de motores y transmisiones, derivado de la falta de componentes provenientes de una planta de Estados Unidos que está detenida por la huelga”. El paro técnico parcial inició este lunes 7 de octubre. Los complejos de General Motors en San Luis Potosí y Toluca “permanecen operando de manera regular”, señaló la empresa. Sin embargo, trabajadores de la planta General Motors en Silao han denunciado que por lo menos unos 25 a 27 empleados de esta sede han sido despedidos de agosto a la fecha, y acusan que el motivo es su respaldo a los huelguistas en Estados Unidos.