CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- La primera prueba de fuego que la directora general de Selecciones Nacionales Femeniles, Andrea Rodebaugh, enfrentará desde que asumió ese cargo en septiembre de 2022 es la Copa Oro W, un torneo de mayor exigencia donde el rival a vencer será Estados Unidos, cuatro veces campeón del mundo.

“Una meta inicial y realista es avanzar en la fase de grupos. Por supuesto que queremos ser campeonas del torneo, pero tenemos que ir partido a partido”, dice Rodebaugh.

Y es que entre el 17 de febrero y el 10 de marzo próximos se realizará por primera ocasión la edición femenil de la Copa Oro, el torneo internacional de selecciones nacionales más importante de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe, popularmente conocida como la Concacaf, y que tiene como objetivo desarrollar el futbol de mujeres, pues prácticamente se duplicará el número de partidos oficiales que las selecciones de esta región disputarán.

La Selección Mexicana (ocupa la posición 35 en el ranking de la FIFA) está ubicada en el grupo A, junto con Argentina (posición 31) y Estados Unidos (lugar 2), y está a la espera de conocer el nombre del tercer rival al que se medirá en la fase de grupos. Las opciones son Guyana (87) o República Dominicana (107), que se enfrentarán en la ronda preliminar de la Copa Oro justamente el 17 de febrero.

“Primero jugaremos contra Argentina, el otro encuentro será contra un rival que aún desconocemos y la verdadera prueba será Estados Unidos. Si vencemos a esa selección tendremos un panorama de nuestro nivel y nos colocaría prácticamente como favoritas, pero iremos paso a paso. Ahorita no pensamos en las estadounidenses, sino en las argentinas”, añade la exfutbolista.

Recomponer el camino

Tras el fracaso de no clasificar a la Copa del Mundo 2023 ni a los Juegos Olímpicos de París 2024, Rodebaugh fue la opción que la Federación Mexicana de Futbol (FMF) eligió para recomponer el camino de las selecciones femeniles. Asimismo, la costarricense Jimena Rojas fue llamada para hacerse cargo como entrenadora de los equipos Sub-15 y Sub-17 y el español Pedro López fue elegido como director técnico del representativo mayor.

“Pedro vivió una situación particular en España, cuando en 2021 fue nombrado entrenador de la Sub-17, Sub-19 y Sub-20; fue cuando la Real Federación Española de Futbol apoyó económicamente más a la Selección española y fue en ese mismo año cuando nació la Liga Profesional de Futbol Femenino. Queremos aprender de su experiencia, pues algo similar está ocurriendo en México y hay que capitalizarlo en el campo”, explica.

En 2022 López ganó la Eurocopa femenil con la Sub-19 española y la Copa Mundial femenil con la Sub-20. Por su parte, Rojas dirigió al Asheville City Soccer Club, de la USL W League, y al Lake Norman Soccer Club y Charlotte Independence Soccer Club, de la WPSL (Women’s Premier Soccer League), ambas ligas de Estados Unidos.

Además fungió como analista de rendimiento deportivo en el Comité Olímpico de Costa Rica y como directora técnica y coordinadora de los equipos Sub-15 y Sub-17 en la Primera División de Costa Rica.

“Vi trabajar a Jimena en una capacitación que hizo la FIFA. Ella tiene experiencia con clubes de Estados Unidos, pero también en la detección de talento y en categorías menores”, precisa.

Además de tener a su cargo las categorías Sub-15 y Sub-17, Jimena Rojas también forma parte del cuerpo técnico de Pedro López con la intención de que “el modelo de juego” de la Sub-20 (que dirige Ana Galindo) y de la Selección mayor permee a las inferiores para generar la misma identidad en todos los equipos femeniles. Éste es el eje del plan de trabajo de Rodebaugh. Dicho modelo fue creado a partir de las características de las futbolistas mexicanas.

“Hay selecciones como Estados Unidos, Canadá, Alemania, Inglaterra y Australia que basan su juego en la fuerza y velocidad. Si bien trabajamos esos aspectos con un especialista en fuerza, nuestra propuesta es que México tenga posesión del balón, lo circule rápido y con precisión, y que utilice bien los espacios o los genere. Queremos que, sin importar la categoría o quién esté dirigiendo, la gente identifique cómo juega México”.

Detección de las mejores por jornada

Además, Rodebaugh destaca que realizan un seguimiento muy puntual al desempeño de las jugadoras de la Liga MX femenil, así como de los torneos Sub-19, Sub-18 y Sub-17 con la intención de evaluar su rendimiento para que en las convocatorias se llame a quienes estuvieron mejor en la jornada que recién concluyó y no necesariamente a las que ya estuvieron concentradas previamente o disputaron un torneo.

Esto promueve la competencia interna y permite que las jugadoras de categorías inferiores lleguen a la Selección mayor con confianza, experiencia, madurez y conocimiento del modelo de juego. Esta “profesionalización”, como ella lo conceptualiza, ha permitido tener un impacto tangible en la cancha.

La directora de Selecciones Femeniles añade que en las categorías Sub-17, Sub-18 y Sub-19 están trabajando tanto para desarrollar jugadoras como directores técnicos para que tengan una mejor preparación cuando lleguen a la Primera División o la Selección mayor y que incluso se conviertan en material de exportación.

Rodebaugh vivió en carne propia la falta de un espacio profesional para que las mujeres jugaran futbol en México, por lo que tuvo que hacer su carrera en el extranjero. Tras su retiro se convirtió en entrenadora. En 2008 dirigió al representativo femenil en la Copa Mundial Femenina Sub-20 en Chile y también a las Xolas de Tijuana entre 2017 y 2018, en los albores de la Liga MX Femenil. Estas experiencias le permitieron diseñar una estrategia para detectar talentos menores de 17 años.

“A través de las visorías en cada club detectamos a esas jugadoras para potencializarlas en edades tempranas y que se desarrollen en un entorno adecuado con un cuerpo técnico profesional, capaz y especialista en futbol femenil y que no suceda como en mi época, que tenías que ir a tocar puertas para pedir una prueba en la Selección”.

Menciona que cuando ella jugaba, en la década de los 90, había contadas futbolistas menores de 18 años con un alto nivel de competencia, pero ahora, gracias a la existencia de la Liga MX Femenil, en cada club existe por lo menos una jugadora menor de edad que destaca por su talento.

Las visorías en Selecciones Nacionales las lleva a cabo Karina Báez, quien de 2021 a 2022 fue entrenadora de Pumas femenil, y antes estuvo como auxiliar técnica en Tigres y en el Pachuca. Otro punto que ha favorecido el crecimiento futbolístico de las seleccionadas mexicanas es la llegada de las extranjeras, asegura Rodebaugh.

Las consecuencias del trabajo

Para Andrea Rodebaugh el hecho de que la Selección Nacional femenil haya ganado un par de medallas de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023 (vencieron 2-1 a Venezuela, lugar 53 en el ranking), así como en los Juegos Panamericanos Santiago 2023 (derrotaron 1-0 a Chile, número 39) no fue por casualidad, sino la consecuencia de todo el trabajo que se ha realizado durante más de un año.

“Todo partido se puede ganar o perder y hay muchos factores que influyen. Puedes tener mejor ranking a nivel mundial, pero si no realizas una preparación adecuada, un análisis del rival y propio, cualquier equipo te puede ganar”, asegura.

En la Copa Oro W, México enfrentará a rivales de mayor jerarquía. En la fase de grupos se medirá ante Estados Unidos, que además de sus títulos mundiales en nueve ocasiones ha ganado el Campeonato Femenil de la Concacaf (una de las dos competencias regionales asociadas a la clasificación para el Mundial de la FIFA que se realiza cada cuatro años) y ostenta cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos.

También participarán Canadá, décimo primer lugar en el ranking mundial; Brasil, equipo que está un peldaño atrás, y Colombia, Selección que llegó a los cuartos de final del Mundial Australia/Nueva Zelanda 2023.

“Nos vamos a enfrentar a países con mayor experiencia e históricos en el futbol femenil. Para nosotras es importante seguir creciendo, queremos ser campeonas, pero para ello hay que seguir asimilando este modelo de juego. En Centroamericanos y Panamericanos demostramos de lo que somos capaces y seguiremos creciendo”, concluye.