DOHA (AP).— El técnico de la selección de España, Luis Enrique Martínez García, asignó una tarea singular a su equipo tras la derrota por penales ante Italia en las semifinales de la Eurocopa del año pasado.

“Hace más de un año, en alguna de las concentraciones, les dije a los jugadores: ‘Señores, tienen deberes. Cada uno tiene que llegar con mil penaltis tirados en sus equipos’. La mayoría habrá hecho los deberes”. recordó Luis Enrique el lunes.

Aunque España no quiere que su cruce contra Marruecos el martes por los octavos de final del Mundial se defina por penales, al menos tiene la seguridad de que se preparó para afrontar esa circunstancia.

España también sucumbió en una tanda desde los 12 pasos en los octavos de final del Mundial 2018, ante la anfitriona Rusia.“

Para mí no es una lotería, tienes que mostrar tu calidad en un momento de máxima tensión y aguantarla dice mucho de cada jugador”; “cada vez es menos suerte. Se puede entrenar, es manejable”, dijo el técnico español.

Ferran Torres transformó un penal para España en la victoria 7-0 ante Costa Rica en el debut.

El arquero español Unai Simón atajó un par de remates en el triunfo en una tanda de penales ante Suiza previo al duelo contra Italia en la Euro 2020.

“El portero tiene influencia. Tenemos un muy buen portero que domina esa situación del juego”, indicó.

Marruecos ha sido una de las grandes revelaciones del torneo tras salir primero en un complicado grupo. Quedó por delante de Croacia, subcampeona del pasado Mundial, y Bélgica, semifinalista de 2018.
El seleccionado norafricano encajó apenas un gol en sus tres partidos de la fase de grupos y disfruta de mucho apoyo en Qatar, por ser el último de los cuatro equipos árabes que sigue en carrera –y también el último de África– luego que Senegal fue eliminada ante Inglaterra el domingo.

“Todo el mundo quiere venir a Doha”, dijo el técnico marroquí Walid Regragui, quien tomó las riendas de la selección en agosto pasado. Y añadió: “Podríamos llenar dos estadios”.

Como vecinos cercanos, también hay muchos nexos entre Marruecos y España.

El arquero marroquí Yassine Bounou y el delantero Youssef En-Nesyri juegan en España con el Sevilla. El talentoso lateral derecho Achraf Hakimi, del Paris Saint-Germain, nació en Madrid. Regragui jugó en España con el Racing Santander.

Varios de los jugadores marroquíes hablan español y su personal médico es español.

“Las relaciones con Marruecos son espléndidas, muchos marroquís viven en España y nos llevamos bien”, destacó Luis Enrique; “a disfrutar de lo que significa una cita de este calibre”.

España enfrentó a Marruecos en el cierre de la fase de grupos del Mundial de 2018, partido que se saldó con un empate 2-2.
“Ellos juegan a la posesión, lo cual es algo que complica al rival, pero también a los que miran”, dijo Regragui. “Tak, tak, tak, tak, tak hasta que los jugadores se cansan”".

Como inspiración, Marruecos toma como ejemplo el triunfo de Japón ante España en la última fecha de la fase de grupos, cuando Japón apenas tuvo el 17% de la tenencia.

“Necesitamos tener temple. Necesitamos aceptar que van a dominar la posesión. España no sabrá qué hacer con tanta posesión. Ese va a ser nuestro plan”, señaló Regragui.

El ganador se medirá contra Portugal o Suiza por una plaza en las semifinales.