CIUDAD DE MEXICO (apro).- Jorge Adán Cárdenas, el levantador de pesas que causó controversia y una fuerte llamada de atención a la delegación mexicana tras bajarse el cubrebocas en pleno desfile de las delegaciones olímpicas durante la ceremonia inaugural, calificó como el segundo mejor exponente del Grupo B en la categoría de 73 kilos en la competencia de halterofilia de Tokio 2020.

El mexicano levantó un total de 320 kilos, como resultado de 145 kilogramos en arranque y 175 en envión en la fase de grupos, con la participación de cinco contendientes.

Cárdenas abrió su participación con intentos de 135 kilos en arranque y 165 kilogramos en envión.

El levantador de pesas falló en su primer intento con una carga de 140 kilos en arranque, pero consiguió reponerse para levantar el peso seleccionado en su segunda oportunidad. Luego, en la tercera y última ronda, Jorge Adán subió a 145 kilogramos. Esta vez levantó la barra de forma rápida y con determinación.

En la segunda fase (envión), inició con 170 kilos. Pero enfrentó dificultades para levantar los 175 kilos en la segunda ronda y terminó por tirar la barra al suelo.

En el definitivo intento, el mexicano levantó el peso del suelo y cuando se alistaba para llevar la barra al pecho se activó la chicharra que señalaba que la acción no era válida porque se le terminó el tiempo para ejecutar la acción.

De inmediato, los entrenadores solicitaron el desafío -revaluar el levantamiento-, los jueces revisaron las imágenes y luego de unos minutos dieron por válida la carga.

A falta de la actividad del Grupo A, el pesista mexicano, ya sin oportunidad de aspirar al podio olímpico, espera conocer el lugar en que concluirá su participación en Tokio 2020.