MONTERREY (apro).- El entrenador Francisco Avilán, quien le dio a Rayados su primer título de Liga en 1986, falleció hoy por covid-19, después de estar internado por más de una semana.

El club de futbol Monterrey dio a conocer el deceso en sus canales oficiales.

“Lamentamos profundamente el fallecimiento de Francisco Avilán Cruz, director técnico en el primer título de Liga en 1986 y amigo entrañable de la Institución. Gracias por nuestra primera estrella y por todo. Te recordaremos por siempre, Pancho”, señala el mensaje de la institución.

En el post se recuerda que Avilán, quien al morir tenía 73 años, fue jugador, con Rayados y Chivas, de 1974 a 1970 y de 1971 a 1972, y fue el primer regiomontano en ser convocado a la Selección Mexicana.

Su último trabajo como profesional del balón fue con Jaguares de Chiapas, a los que dirigió interinamente en el 2008.

La trayectoria de Avilán quedó marcada al ser entrenador de la Selección Mexicana sub 20, a la que le encontraron varios jugadores con el acta de nacimiento alterada. En la eliminatoria de 1988, para que los juveniles acudieran al Mundial de la categoría al año siguiente, en Arabia Saudita, fue descubierto el timo, con el que se hicieron pasar por menores jugadores que excedían la edad.

Como consecuencia de este fraude, conocido como el cachirulazo, la FIFA determinó que el combinado mexicano quedara excluido durante dos años de cualquier actividad federada, por lo que la selección mayor se perdió el Mundial de Italia 90.

El escándalo, sin embargo, no impidió que Avilán continuara con su trayectoria como entrenador en el balompié mexicano.

Entrevistado la semana pasada, Francisco Javier “Abuelo” Cruz dio a conocer que Avilán y su esposa Laura Garza estaban internados en la clínica 25 del Seguro Social afectados por coronavirus.

El mundialista mexicano quien dijo que lleva una relación de familia con la pareja, explicó que era ella la más delicada y que el exentrenador se encontraba de muy buen ánimo y optimista.

Por su cercanía con los Avilán, mencionó que el contagio les vino de una fuente cercana.

“Desgraciadamente creo que los nietos provocaron que se contagiaran, porque los señores habían permanecido siempre en su casa. Yo tengo una relación de familia con ellos, como si fueran mis papás, y todos los días nos comunicamos por teléfono por el cariño que tenemos”, explicó el goleador