CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).– El Atlas calificó a las semifinales por primera vez en 17 años, al empatar 1-1 con el Monterrey en la cancha del estadio Jalisco.

Su mejor posición en la tabla le dio el pase a la siguiente ronda del Torneo Grita 2021, en donde se medirá a los Pumas que humillaron y eliminaron al América como visitantes.

El único tanto de los rojinegros que dirige Diego Coca fue consecuencia de un penalti inexistente señalado por el árbitro César Ramos, quien marcó un empujón de Erick Aguirre sobre Luis “El Hueso” Reyes.

La jugada de revisó en el VAR y a pesar de que las imágenes enseñaron que “El Hueso” abanicó el balón y terminó por atorarse en el césped, la falta prevaleció.

Así, al minuto 18, Julio Furch convirtió el 1-0 que puso al Atlas con un pie en las semifinales.

Antes del descanso, Ponchito González amenazó con el del empate, pero un providencial Camilo Vargas evitó la caída de su marco.

En la segunda mitad, fue el propio Ponchito González quien apareció al 73 para darle esperanzas a los Rayados.

Maxi Meza puso un servicio lateral, Anderson Santamaría perdió la marca, González buscó el primer poste y metió un cabezazo salvaje que dejó sin ninguna oportunidad a Vargas.

Julián Quiñonez intentó una espectacular chilena que pudo ser el gol para que el Atlas amarrara la clasificación, pero el balón se fue apenas por el costado derecho de Esteban Andrada.

Los últimos minutos del encuentro, Monterrey presionó con todo. Ramos añadió siete minutos y jugadores de ambos equipos se liaron a empellones y los aficionados exigiendo en las gradas el silbatazo final.