CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En el marco del 60 aniversario del Museo Anahuacalli se celebró el diálogo “El pedregal de Diego: inspiración y origen del Anahuacalli y su conexión arquitectónica”, en donde se dio lectura a una carta inédita entre Diego Rivera y Carlos Lazo, en la cual el artista dice ver al Anahuacalli (al que denominaba en proyecto Ciudad de las Artes) como un complemento natural de Ciudad Universitaria.

En una fructífera plática en el Anahucalli, en donde todos los presentes puntualizaron en la visión arquitectónica de Diego Rivera, se reunieron en conferencia abierta Teresa Moya Malfavón, directora del museo; Dirk Denison, director del Premio Mies Crown Hall Americas Prize, quien recibió recientemente el Anahuacalli; Juan Ignacio del Cueto, director de la Facultad de Arquitectura de la UNAM; y Mauricio Rocha, arquitecto que llevó a cabo los más recientes trabajos de la ampliación del museo.

Ahí se abordaron las características de la arquitectura contemporánea del Anahuacalli, en específico, cuando Juan Ignacio del Cueto recordó el deseo de Rivera de crear una “Ciudad de las Artes” abierta a todas las disciplinas, proyecto de largo aliento que el artista no logró concretar debido a su fallecimiento.

Del Cueto dio lectura a una breve misiva del artista de finales de 1960 que le envío al arquitecto Carlos Lazo en los inicios del Anahuacalli, misma que el joven arquitecto Juan Manuel Salazar Pérez encontró en el Archivo General de la Nación y publicó como parte de su tesis profesional, esa nota fue recopilada por la revista Bitácora Arquitectura de la UNAM en una de sus publicaciones de 2023, en la cual se lee:        

“Señor arquitecto, Don Carlos Lazo:

         “Fui con nuestro amigo el arquitecto Aray a San Pablo Tetetlapa (pueblo dondo se encuentra el Anahuacalli), él le explicarrá verbalmente el proyecto de ‘La Ciudad de las Artes’, complemento de Ciudad Universitaria, estoy seguro que el resultado será estupendo y de realización factible, pero habra que actuar rápidamente.

Aray le explicará por qué quisiera que nos reunieramos los tres el día más próximo posible.

         Un abrazo,

         Diego Rivera”.

Y culminó recordando que en enero de 2023 el comité científico de la Fundación Bennetton, el cual entregó el Premio Carlo Scarpa de Paisaje a la Reserva del Pedregal de San Ángel y el Espacio Escultórico, realizó una visita por distintos puntos de la ciudad y el país, para luego centrarse en la reserva del Pedregal y como parte de esta hizo una visita al Museo Anahuacalli, sobre lo cual dijo:

“Ellos entendieron la relación entre uno y otro, y estoy convencido de que la visita al Anahuacalli les hizo comprender mucho más a la reserva del Pedregal, uno de los últimos resquicios naturales del sur... Lo importante es que Rivera tuvo esa visión de que el museo dialogara de manera orgánica con el terreno”.

Teresa Moya comentó que el museo es una invitación para mirar al pasado y sobre todo el presente, el compromiso de Rivera con la conservación del paisaje y su habilidad de crear un espacio que sigue resonando en la cultura mexicana, al que definió como un lugar para artistas, arquitectos y visitantes de México y el mundo, al tiempo de agradecer a todo el equipo de trabajo que hace posible la continuidad del museo.

En su turno, Mauricio Rocha recalcó al Anahucalli como un manifiesto de la cultura de Diego Rivera en su máxima expresión, en especial cuando se atrevió a apostar por un espacio que en su momento se denominó “Mal país”, esto por ser un terreno no apto para siempre, entre piedras e incómodo para muchos, al tiempo que relató brevemente los elementos que tomó en cuenta para la expansión del museo:

“Este lugar tiene algo maya, de la cultura del altiplano, es toda una experiencia, ciertamente es un edificio grotesco, sin ser peyorativos y como tal una manifestación de la energía, visualidad, pero sobre todo una muestra de la cultura, la conciencia e imaginación”.

Mientras que Dirk Denison, director del Premio Mies Crown Hall Americas Prize, hizo un repaso del galardón entregado al Anahuacalli en el cual afirmó que el proceso de entrega es lo que marca diferencia, pues pone énfasis en el impacto del recinto con el paisaje, medio ambiente y todos los elementos con los que convive, además de reconocer la labor de expansión como una obra ejemplar, no solo por su excelencia arquitectónica, sino por su capacidad para articular la cultura ancestral de México. Denison incluso presumió el galardón entregado con el público.

Al finalizar la conferencia se invitó a todos los participantes y asistentes a partir un pastel con una imagen del Anahuacalli.