Tren Maya
“Tengo la razón... es una venganza política”: Cortés de Brasdefer ante citatorio por Tren Maya
CIUDAD DE MÉXICO (apro).-
Con el respaldo de miembros de sindicatos y los gritos de “¡Todos somos Fernando!” y “¡No estás Solo!", el arqueólogo Fernando Cortés de Brasdefer acudió al citatorio del Órgano Interno de Control (OIC) en el INAH para responder ante una presunta falta administrativa por haber señalado destrucción al patrimonio derivado del Tren Maya. “Es una venganza política”, dijo a Proceso al salir del llamamiento.
Unos 40 trabajadores y miembros de tres sindicatos --"Restauradores”, “Profesores de Investigación Científica y Docencia”, y “Democratico de Trabajadores de la SC”-- del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), protestaron pacíficamente y a favor de Cortés de Brasdefer (adscrito al Centro-INAH Quintana Roo), quien compareció ante el OIC en Hamburgo 135 en la colonia Juárez, entrada principal que se llenó de pancartas (con frases como “alto al acoso laboral”), banderas, lectura de comunicados y posturas de apoyo al investigador.
Lo anterior luego de que Cortés de Brasdefer fuera acusado de “infringir la ley, divulgar documentos oficiales y poner en riesgo la vida del personal de las oficinas locales del INAH”, derivado de un escrito que circuló en primeras instancias en grupos de whatsapp y luego se hizo público, en el que se narra la destrucción de monumentos arqueológicos a partir de las obras del Tren Maya (Proceso, 2428) por lo cual enfrenta un proceso ante actas administrativas del instituto levantadas en mayo y junio de 2023. A raíz de esto, el pasado 11 de octubre el Órgano Interno de Control en el INAH de la Secretaría de la Función Pública le envió un citatorio para comparecer este 5 de noviembre.
Los investigadores Felipe Echenique, Igor Quintana, Cecilia Vazquez Ahumada, la restauradora Ximena Rojas Muñoz, y el antropólogo Gilberto López y Rivas, fueron algunos de los que tomaron el micrófono para respaldar al arqueólogo.
Fue el sindicato de “Profesores de Investigación Científica y Docencia” los que leyeron y compartieron el siguiente comunicado:
“El colega Cortés de Brasdefer es especialista en el área Maya desde hace más de cuarenta y cinco años y sus puntos de vista críticos, basados en su conocimiento y trayectoria, provocaron una reacción represiva en su contra por parte de las autoridades del INAH, a tal grado que pretenden su despido violentando las Condiciones General del INAH.
“La Asamblea General de nuestro Sindicato, reunida el 31 de octubre del año en curso, hace notar que México es suscribiente del Convenio 190 emitido por la Organizacion Internacional del Trabajo y que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social emitió la NOM035STPS, recalcando que ambas normativas son instrumentos para prevenir y erradicar las violencias y el acoso en el mundo del trabajo, por lo cual conminamos a las autoridades del INAH al cese de hostilidades contra nuestro colega, el retiro inmediato de las actas levantadas y el respeto irrestricto a su derecho de disentir”.
Acompañado de su abogado (Alfonso Figueroa, especialista en derechos administrativos y laborales) Cortés de Brasdefer acudió a la cita que duró cerca de dos horas, y a su salida dijo que acudió para complementar información por escrito refutando las acusaciones, y que tendría que esperar 15 días para obtener una respuesta del OIC.
Sobre su sentir ante el proceso comentó:
“Me siento bien porque sé que tengo la razón, falta que la acepten, porque legalmente y de manera profesional tengo la razón, políticamente es complicado. Lo que está en auge es una venganza política, esperemos que haya una resolucion coherente y profesional”.
Respecto a si acudiría a instancias de derechos humanos para defenderse apuntó:
“A la comisión Interamericana de Derechos Humanos porque como veo la situación el director general (del INAH, Diego Prieto) insiste en terminar lo que empezó del Tren Maya, porque no está terminado. Ahora no hay denuncia ante derechos humanos, pero sí las cosas se ponen mal hay que actuar”.
Cortés de Brasdefer finalizó afirmando que continúa laborando como siempre:
“Sigo trabajando, piden el cese de labores, pero no solo es eso, el Consejo de Arqueología emitió un comunicado denigrante, me ponen como el peor arqueólogo del mundo, hay que demostrar que no tienen la razón, la razón está en lo que hicieron allá (en el Tren Maya).