Día de Muertos

Trilce presenta su libro “02.11. Día de Muertos”

Con más de 600 fotografías de un archivo de 25 mil, este libro editado por Déborah Holtz y Juan Carlos Mena en Trilce Ediciones es un homenaje que abraza todos los sentidos: artesanía popular, disfraces y máscaras, comida y bebida, música y bailes, desfiles, altares, flores, calaveras, murales...
sábado, 12 de octubre de 2024 · 20:13

CIUDAD DE MÉXICO (apro).-Fundadora de Trilce Ediciones hace un cuarto de siglo, la socióloga y escritora Déborah Holtz (CDMX, 1960) habla sobre “02.11. Día de Muertos”, una celebración de la vida y la muerte, libro diseñado con Juan Carlos Mena, que captura el asombroso espectro desde la herencia tradicional mexicana de dicha festividad hasta su alcance contemporáneo universal.

Dice sonriente la también fotógrafa:

“Ha sido una labor titánica, una odisea porque hemos estado muy amoladas las personas de la cultura nacional, pero ai’ vamos en Trilce librándola como podemos, y mira que yo vengo de una familia muy trabajadora desde siempre… Me encanta lo que hago y poco me importa quienes digan que esto es cosa de nacos, ¡es la historia de mi vida!”

Con más de 600 fotografías de un archivo de 25 mil, este libro es un homenaje que abraza todos los sentidos: artesanía popular, disfraces y máscaras, comida y bebida, música y bailes, desfiles, altares, flores, calaveras, murales, objetos y juguetes de colección. Déborah Holtz añade con alegría:

“Con 02.11. Día de Muertos no pretendemos ser la Biblia de nadie, pero sí dar cuenta de un fenómeno que aún no estaba recogido. Queremos aportar nuestra visión, además de dar los fundamentos de dónde proviene esta celebración de vida y nos parece genial que el libro se venda en Estados Unidos, porque para muchos norteamericanos es sólo un desfile. ¡No, no, señores, esto no es un desfile! Viene de aquí… Es importante para que se puedan difundir las raíces de esta gloriosa conmemoración de los difuntos.”

La muerte tiene permiso

Déborah Holtz llama “una aventura” a celebrar en Trilce Ediciones, https://www.trilce.mx/ empresa que cumplirá el año entrante 25 años activa.

“Se trata de una editorial muy ecléctica y rara, porque además de publicar libros como los hacen la mayoría de mis colegas, nosotros desarrollamos los contenidos. Yo y mi socio, el diseñador editor Juan Carlos Mena nos hemos convertido en autores editores, es decir que se nos ocurre un tema y vemos cómo conformar el equipo de investigación, de fotografía, de ilustradores, etcétera, para ir haciendo un libro a mano y reconfigurando toda la información que compilamos a fin de generar un contenido uniforme, pues de lo contrario acabaríamos con una especie de prontuario o revista de colección de artículos, lo cual no está mal sólo que nosotros preferimos entregar algo totalmente unitario.”

Así surgieron sus volúmenes ilustrados La Tacopedia. Enciclopedia del taco (2015), Aguacate (2022), y el libro del pintor Pedro Friedeberg (2023), éste “como una apuesta de casi siete años partiendo de una investigación de cero”. Ahora, 02.11. Día de Muertos. Una celebración de la vida y la muerte también tardó en completarse más de seis años. Prosigue Déborah Holtz:

“Tras la salida de la película animada Coco y la de James Bond 007 Spectre, filmada en el Centro Histórico, el panorama de lo que era el Día de Muertos cambió radicalmente: de ser una celebración íntima, más ligada a costumbres muy arraigadas en ciertos pueblos --como en Hidalgo--, se destapó cual si fuera una fiesta callejera gracias al desfile con gente disfrazada de calaveras en el Zócalo que inicia la película Spectre, pues eso adicionó algo nuevo por decirlo de alguna manera a la celebración tradicional.

“Al darme cuenta de lo que sucedía me dije: ‘No hay un libro que esté recogiendo esto’; si bien hay extraordinarios que narran el origen del Día de Muertos porque existe muchísima literatura al respecto, desde nuestro punto de vista no había ninguno que captara este fenómeno que se ha transformado y extendido al mundo con la actualidad que merece. Entonces nos propusimos hacer un libro de Día de Muertos y ha sido un infierno, pero estoy feliz de que haya salido, porque ha sido uno de nuestros libros más complicados.”

02.11. Día de Muertos va desde Mictlantecuhtli hasta 007 Spectre, puesto que la meta de Holtz era reunir todo aquel caleidoscopio mexicano en una especie de abanico que abarcara su probable origen a partir de las culturas prehispánicas (“nadie celebraba el Día de Muertos con veneración tan íntima a los difuntos”) y mostrar los aspectos de las diversas culturas originarias que tenían relación con la muerte (“desde el Mictlán, etcétera, más lo que nos llegó de Europa, Todos Santos, las tradiciones obviamente españolas y la fusión que ello provocó para dar como resultado el Día de Muertos”). También había que recoger el siglo XX (“con José Guadalupe Posada y la maravilla que fue su escuela de grabado con el Taller de la Gráfica Popular”) hasta lo contemporáneo incluyendo algunas colecciones de arte popular relacionadas con la muerte (“los juguetes que son una joya –tenemos un juguetero formidable que fuimos a entrevistar--, el arte contemporáneo con las instalaciones espectaculares de Betsabé Romero en los Kew Gardens londinenses, las Islas Canarias y Nueva York…”).

Y finalmente, refiere Déborah Holtz, “los desfiles por el Día de Muertos que hoy se dan hasta en Australia o Bélgica, ¡hazme favor!... Todo el panorama que se conoce como Día de Muertos comprende este libro”.

En Estados Unidos lo publicó con portada dura la prestigiosa editorial Rizzoli International Publications de New York (rizzoliusa.com ISBN: 978-0-8478-7267-1) y para el público en español Planeta Estados Unidos.

“Es un libro con 331 páginas que Trilce Ediciones ha hecho sin ninguna clase de apoyo, ni de gobiernos ni de empresas; nuestro archivo contiene más de 25 mil imágenes entre fotógrafos y artistas de la imagen que contratamos especialmente para captar las festividades en diferentes partes de la República Mexicana, entre ellos Jesús López, que si en Oaxaca, Michoacán, Hidalgo, San Luis Potosí, Tlaxcala, en fin. Eso le da un aspecto bien padre al libro.

“Quisimos mostrar las distintas maneras como se celebra el Día de Muertos en determinadas comunidades que específicamente festejan a sus difuntos en México, entonces terminamos como solemos hacer: con un mapa fantástico de cómo se celebra el Día de Muertos en la República Mexicana, con sus particularidades de cada región.”      

Por otro lado, incluye “el A B C” de la tradición de Día de Muertos desde cómo se construye un altar, cuál es la gastronomía ligada al Día de Muertos de acuerdo con las localidades:

“Hay sitios como Oaxaca y Michoacán con toda su tradición del pan es increíble y todo está fotografiado con entrevistas a panaderos, los artesanos que hacen las calaveritas de azúcar, el papel picado, entonces yo considero que es un libro muy completo y con más de 600 imágenes. Los textos abarcan unas 250 cuartillas, pero no se siente al leerlas ya que van muy seccionadas para hacer su lectura más amable.”

Calaveritas del Mictlán

--¿Entrevistaron a una tanatóloga como Gaby Pérez Islas?

--No, pues no es un libro sobre la muerte sino acerca del Día de Muertos. Es diferente, aunque nuestro antropólogo de cabecera José Erik de Mendoza Luján, quien colaboró con nosotros en torno a las culturas prehispánicas, su especialidad es justamente la cultura de la muerte y cubre los primeros capítulos del libro.

--Nosotros personificamos a la muerte como femenina: La Catrina. Pero en lápidas medievales de Escandinavia la muerte está simbolizada por una figura masculina y su libro 02.11. Día de Muertos trae una pintura del alemán Hans Baldung con un hombre cadavérico acosando y besando a una dama…

--La Catrina viene a ser el símbolo femenino de la muerte desde fines del siglo XIX por toda la tradición del grabado al cual hemos dedicado una sección especial con Manuel Manilla, José Guadalupe Posada o Leopoldo Méndez, por ejemplo. La Catrina se ha vuelto una de las representaciones más socorridas para el Día de Muertos, sobre todo porque es un disfraz increíble, más ahora con los desfiles, ella es la número uno y va a la vanguardia. Pero esto nos conduce hasta el actor Daniel Craig de Spectre y a nuestro Charro González, que se unió a la aventura del libro como vocero de los desfiles, ellos pusieron de moda la figura del hombre simbolizando la muerte.

“Sin embargo, si lees el libro hallarás que en Europa muchas de las representaciones de la muerte en pinturas españolas e italianas son mujeres.”  

--También en Irlanda los antiguos celtas celebraban este día…

--Hay varias celebraciones que se mencionan, ahí están salpicadas en el libro, aunque esa tradición celta se volvió más presente con Halloween, la calabaza que los niños llevan para pedir dulces o pedir calaverita el 31 de octubre, todo aquello que venía de Irlanda en la tradición anglosajona. También lo tocamos en el libro, pero no me clavo en Halloween pues es otra onda que introdujimos a nuestra cultura por obvias razones.

--En su novelita El árbol de las brujas (The Halloween Tree) de Ray Bradbury, niños gringos viajan a la celebración de muertos por el planeta pero, cuando llegan a Pátzcuaro, al comer calaveritas de azúcar dicen que no hay nada más divertido que el Día de los Muertos en México…

--Se ha globalizado este fenómeno –comenta Holtz-- antes muy mexicano a causa de Hollywood. No que no hubiese películas de los años 50s y 60s, ahí tienes Macario [1960], la historia de B. Traven por Roberto Gavaldón o Calacán [1985] de Luis Kelly, paradigmáticas por mostrar este acercamiento a la muerte y al Día de Muertos; pero nada como sucedió a raíz de Coco [2017] de Disney, fue un fenómeno mundial que le dio un escaparate a la celebración que no existía. Precisamente el libro termina con un epílogo cuyo texto se lo pedí a Elizabeth Malkin, periodista que respeto muchísimo porque vive en México y sabe, es corresponsal del The New York Times y suyo es el único texto firmado de 02.11. Día de Muertos. Le pedí que escribiera sobre esta exacerbación y explotación comercial de nuestras tradiciones populares del Día de Muertos jamás pensadas así en sus orígenes. Incluso hay muñecas Barbie del Día de Muertos y una Catrina Barbie, ¡no puede ser!

“Todo eso viene en este libro, es un volumen muy divertido, muy gozoso; pero para nada irrespetuoso”, concluye Déborah Holtz, quien presentará "02.11. Día de Muertos" coedición de Trilce con Juan Carlos Mena el 27 de octubre en Francisco Santiago Borraz esquina con Enrique Lombardo, Colonia Santa Cecilia en Tláhuac, 4:30 P.M. y el 2 de noviembre a las 5 de la tarde en el Panteón de San Fernando, con los aliados de esta aventura de Trilce Ediciones: El Charro González, Mole Doña María, Cerveza Victoria y Mezcal de Oro Oaxaca.

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