CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El exfutbolista Gerard Piqué y su pareja Clara Chía, con quién se relacionó mientras vivía con la cantante colombiana Shakira, se fueron de vacaciones a Croacia, junto con los padres del ahora empresario catalán y su hermano Marc Piqué, después de su boda con María Valls, en Barcelona, España, celebrada el 23 de junio.

Viajaron a Dubrovnik, acompañados de los progenitores del presidente de la Kings League, Joan Piqué y Montserrat Bernabeu. Se fueron después de la boda de Marc y María celebrada en la parroquia de Sant Vicenc de Montalt, el día de San Juan.

A la boda de Marc no acudieron sus sobrinos Sasha y Milan, hijos de Shakira y Piqué, debido al convenio de convivencia regulador firmado por ambos.

Los recién casados y sus invitados alquilaron un barco para pasar el día en altamar. Surfearon y fueron perseguidos por los paparazzi.

Según la revista Hola, Clara Chía se lleva muy bien con la madre de Piqué, Montserrat Bernabeu, pues pertenecen a la “élite barcelonesa” y sus tradiciones familiares son similares: Los Chía “veranean” en Calella de Palafrugell y pasan los meses más fríos en la Cerdanya, algo similar a lo que hacen los padres de Piqué, quienes tienen una vivienda en Maresme, a donde fueron tras la boda de Marc y María.

María Valls y Clara Chía tienen una buena relación porque, según la revista, sólo se llevan ocho años y tienen trabajos similares. La primera es especialista en organización de eventos y la segunda, en relaciones públicas.