Bad Bunny
Bad Bunny armó en grande tres horas de reguetón en el Azteca
A diferencia de la primera entrega del viernes en la que se mostraban unas graderías cuasi vacías, para la celebración sabatina desde las 19:30 el interior del “coloso de Santa Úrsula” relucía prácticamente abarrotado.CIUDAD DE MÉXICO (apro).–El artista portorriqueño Bad Bunny cerró su gira “World’s Hottest Tour” este sábado 10 con una intensa fiesta de reguetón de más de tres horas en el monumental Estadio Azteca, luego de que la primer fecha del viernes 9 se vio opacada por el caos del boletaje falso o clonado, impidiendo acceder a gran parte de la fanaticada en el recinto.
Sin embargo, a diferencia de la primera entrega del viernes en la que se mostraban unas graderías cuasi vacías, para la celebración sabatina desde las 19:30 el interior del “coloso de Santa Úrsula” relucía prácticamente abarrotado, con las butacas visiblemente repletas, y sólo se observaron huecos en la parte trasera a nivel cancha.
La fiesta estaba más que lista y el evento emprendió vuelo pasaditas las nueve quince de la noche (cuando el pasado viernes 9 de diciembre había iniciado con retraso, alrededor de las 22 horas).
Benito Antonio Martínez Ocasio, nombre de pila del “Conejo Malo” Bad Bunny emergió, recibiendo bienvenida de un estallido de alaridos ensordecedores, al ritmo de “Moscow Mule” y “Me porto bonito”.
El cantante proclamado como el más se escucha actualmente en el mundo por segundo año consecutivo, según la empresa de servicios multimedia sueca Spotify, rápidamente conectó con sus fieles que en su mayoría fueron chicas y chicos veinteañeros y frisando el treintón que lo idolatran. Sus prosélitos corearon a todo pulmón hasta desgañitarse y zangolotearon a rabiar cada uno de los cortes, haciendo temblar con zapatazos al inmueble coyoacanero de la Santa Úrsula.
La ingeniosa producción colorida diseñó escénicamente una paradisiaca isla con playita incluida. Bad Bunny, bailarinas y bailarines, danzaron entre jocosas coreografías y candente perreo, en una gala que enaltecía al eros y las almas festivas.
Después del cantar “Efecto”, el boricua aprovechó para saludar:
“¡Buenas noches México, bienvenidos al cierre del World’s Hottest Tour! ¡Les juro que todavía no lo puedo creer! Estoy aquí en el Azteca, ¡qué bendición!”.
Griteríos delirantes aclamaron a la celebridad rapera de 28 años, quien en cada oportunidad correspondía con palabras amorosas a su gente; incluso agradeció a quienes desde afuera armaron tremendo pachangón en las calles de la volcánica Santa Úrsula. El “set” musical consideró “Neverita”, “Te boté” y encantó entonando “Así fue”, en tributo al inolvidable “Divo de Juárez” Juan Gabriel.
Un espectáculo de lucecillas constantes incluyó la presentación, pues desde los accesos se obsequiaron pulseras que emitían centellas multicolores, bañando en un manto cósmico al coloso del Azteca. Incandescente pirotecnia, llamaradas borboteando en escena y unas torres sobre la plancha salpicando flamígeros géiseres, edificaron el espectacular acto multitudinario.
El pletórico estadio detonó una muy buena vibra generalizada, en comunión unificada con su artista de principio a fin. El extenso repertorio ofreció un recorrido por “Si veo a tu mamá”, “Bichiyal”, “Tití me preguntó”, “Diles”, “No te hagas” y “Chambea”. Resonó el tema llamado “La canción”, en tanto Bad Bunny sorprendió flotando en una islita que recorría cada rincón del estadio diseñado por don Pedro Ramírez Vázquez y Rafael Mijares a finales de los años sesenta.
Avanzó el show del Bunny con la rola “Enséñame a bailar” y el aclamado cantor aprovechó para proclama de orgullo latino en “El apagón”. Finalizó el jolgorio con inagotable candela resonando “Después de la playa”.
Al filo del escenario, el “Conejo Malo” se despidió visiblemente sonriente con veloz huida más allá de la media noche y entre una fiesta de fuegos artificiales. Este show fue el último de Bad Bunny como parte del cerrojazo de su World’s Hottest Tour, la gira más caliente del mundo, para tomar un receso de tiempo indefinido.
Y en cuanto a la boletera Ticketmaster: ésta recibió jalón de orejas de la Procuraduría Federal del Consumidor, por lo que prometió rembolsar a los compradores de boletos afectados, en tanto que la Profeco desplegó un operativo en apoyo de los asistentes y, a su vez, anunció que prepara sanciones a la empresa distribuidora de tickets.
Lo cierto es que el espectáculo de este 10 de diciembre fue percibido por un sector del público con mejorías, en relación con el del día anterior; incluso algunos apresuraron el paso arribando a horas más tempranas sin faltar, desde luego, los que acamparon en ambas noches del festín. Las quejas de cualquier modo continuaron en redes sociales y Ticketmaster se mantuvo en las tendencias con reclamos masivos.
Cabe recordar que el álbum “Un verano sin ti”, quinta grabación de estudio en solitario y sexto en general de Bad Bunny en Rimas Entertainment, obtuvo Premio Grammy al Álbum del Año 2022. La revista “Rolling Stone” lo situó esta semana en el segundo puesto de los mejores álbumes de rock y pop, sólo por debajo de “Renaissance” de Beyoncé.