Cultura
La bióloga Ana Barahona, al Seminario de Cultura Mexicana
Ana Barahona, egresada del posgrado en Biología de la Facultad de Ciencias de la UNAM y la Universidad de California, Irvine, ingresó al Seminario de Cultura Mexicana.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Para la doctora Ana Barahona, egresada del posgrado en Biología de la Facultad de Ciencias de la UNAM y la Universidad de California, Irvine, su ingreso al Seminario de Cultura Mexicana (SMC) es un reconocimiento a las ciencias biológicas.
No sólo porque el abordaje que la también miembro de la Junta de Gobierno y autora de más de 18 libros y 57 artículos realiza a través de sus investigaciones está relacionado con la Historia y Filosofía de su disciplina, particularmente la evolución y la genética:
En su biografía se destaca que una de sus contribuciones más importantes es el estudio de la historia de la genética de las comunidades indígenas y sus implicaciones médicas; los estudios genéticos en agronomía, antropología y medicina; y el impacto de la teoría de la síntesis moderna de la evolución en México.
Es un honor y a la vez un reto, subraya, pues aunque pareciera sencillo divulgar el conocimiento científico o la cultura, no es tarea fácil. Menciona como ejemplo el que en ocasiones se les invita a dar conferencias en distintos lugares del país, y se encuentran con auditorios que no necesariamente están familiarizados con dichos campos.
Y no obstante ser autora de libros de ciencias naturales y biología para estudiantes de primaria, secundaria y preparatoria, admite:
“Los científicos estamos acostumbrados a hablarnos entre nosotros mismos, tenemos nuestros congresos, nuestras revistas, en fin, como que la ciencia está organizada para que los científicos se conecten entre sí, pero no necesariamente es buena para llevar los conceptos, teorías y disciplinas a la gente más joven. Hablo sobre todo de niños y adolescentes. Eso me ha permitido darme cuenta --a mí en particular-- de lo importante que es llevar el conocimiento científico y humanístico a amplios sectores de la población”.
Indica que se cuenta con el libro de texto universal para primaria y secundaria, además de que hay más opciones para el caso de esta última, pero siempre bajo aprobación de la Secretaría de Educación Pública. Como parte de los proyectos que tiene como miembro del Seminario, está el de realizar un libro de divulgación de la biología.
Desgraciadamente, dice, su elección se dio en el marco de la pandemia, entonces las actividades del Seminario se han reducido. No obstante, ella tiene entre sus proyectos realizar el libro y orientarlo principalmente a niños y jóvenes. El SCM cuenta con la colección Semillero, ediciones breves “de fácil lectura y compresión, sobre temas específicos”.
En su opinión, la crisis sanitaria ha permitido una divulgación mayor y ha mostrado que la gente tiene interés en las cuestiones científicas. Los periódicos, la televisión, las noticias están abordando temas como qué son los virus, por qué hay de ADN y otros de RNA, qué son los genes. El público se está familiarizando rápidamente con los conceptos relacionados con la pandemia del covid-19, “se explica muchísimas veces qué es una vacuna, cómo se desarrolla, que ahorita hay más de cien posibilidades… esto nos ha obligado a comprender de manera vertiginosa”.
Al mismo tiempo la gente está teniendo acceso a un lenguaje científico que de otra manera “hubiéramos tardado mucho en divulgar”. Hablan de anticuerpos, pruebas PCR, el mismo término de pandemia.
Se le pregunta acerca de la interrelación entre la cultura y la ciencia en su desarrollo profesional, en tanto que aborda la biología desde el punto de vista de la historia y la filosofía. Considera ser una investigadora con los pies “en dos mundos: el de la ciencia y el de las humanidades… hay una línea muy tenue”.
Destaca que en muchas universidades del mundo hay departamentos para el estudio de la historia y la filosofía de la ciencia, así como posgrados y revistas especializadas:
“Ahora sabemos que, a diferencia de los años setenta del siglo pasado, cuando se pensaba que la historia de la ciencia era una disciplina que tenía como objetivo hacer estos grandes compendios de la ciencia moderna o historia de la ciencia universal, etcétera, ahora muy por el contrario se sabe que es una disciplina auxiliar a las ciencias, una disciplina complementaria entonces. Ahora se reconoce su importancia”.
Otra cuestión que se le plantea es: ¿de qué manera su especialización en el estudio de la genética en las comunidades indígenas contribuye a aportar información para situaciones como la epidemia del coronavirus?
--Como no soy científica, ni médico, no le voy a contestar en el sentido que está haciendo la pregunta, pero sí le puedo decir que México, todos sabemos, es una nación multicultural, sus poblaciones se han desarrollado en diferentes ambientes y están sujetas a diferentes presiones.
Sus investigaciones se centran entonces en las diferentes genéticas de las distintas poblaciones indígenas en México, cuyos primeros estudios se remontan a los años sesenta del siglo XX, haciendo comparaciones genéticas de poblaciones indígenas con no indígenas. Los primeros resultados se han compilado en el Instituto de Medicina Genómica y han mostrado que las diferencias de los genes pueden ser positivas y negativas.
“Por ejemplo, ahorita que estamos con esta situación del covid-19, pues hay gente que la va a padecer mucho más que otra”.
Pero aclara que no se puede precisar si es por cuestiones genéticas. En el caso de las comunidades indígenas, uno de los problemas --plantea como una hipótesis suya-- es que se trata más de una cuestión social: no contar con lo necesario ante una emergencia:
“Nos estamos enterando de que hay comunidades que tienen el Centro de Salud, si se le puede llamar de esa forma, hasta a cuatro horas de viaje. Entonces creo que es más por la terrible desigualdad, que sigue siendo muy ofensiva en este país, es algo que no ayuda en estos momentos”.
Agrega:
“Entonces no son necesariamente vulnerabilidades biológicas o genéticas, sino más bien, condiciones sociales económicas y la desigualdad social que es terrible”.