CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Con apenas tres meses en el cargo, el narrador, poeta y analista político Abraham Nuncio Limón, renunció a la dirección general de la Biblioteca Vasconcelos. Nacido el 11 de diciembre de 1941 en Texcoco, Estado de México, pero arraigado desde hace años en Monterrey, Nuevo León, Nuncio Limón fue nombrado por el también texcocano Marx Arriaga, director general de Bibliotecas de la Secretaría de Cultura (SC) para reemplazar en el puesto a Daniel Goldin, quien salió en medio de una fuerte polémica en los medios y redes sociales, en la que se dijo que había sido despedido de manera grosera y arbitraria por Arriaga. El 14 de marzo se anunció la llegada del escritor y politólogo, quien aseguró a los medios que daría a la biblioteca –nacida bajo el sino del gobierno de Vicente Fox como un megaproyecto, símbolo del dispendio–, un carácter social para convertirla en una suerte de “universidad de la lectura”. Hace unas semanas, la Vasconcelos cerró sus puertas como medida ante la toma de sus instalaciones por parte de trabajadores del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la SC (SNDTSC), que tomaron también las oficinas de la Secretaría de Cultura (SC) y de la Dirección General de Bibliotecas, de las cuales depende. Finalmente, el pasado domingo 16 de junio se tomó la decisión de reabrir la Biblioteca, y ahora se retira de su dirección el escritor, quien argumenta motivos familiares y hará efectiva su renuncia a partir del próximo 30 de junio, día en el cual termina su contrato. Según información de trabajadores de la biblioteca dada a los medios, el también ensayista “intentó” cumplir con sus propósitos, pero no tuvo mucho margen de acción, pues la mayor parte del presupuesto de bibliotecas va a la Biblioteca de México.