GUANAJUATO, Gto. (apro).- El apogeo de la salsa en los años sesenta y setenta fue revivido con el elevado nivel instrumental de la Orquesta El Macabeo, de Puerto Rico, que convocó al baile en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas durante su presentación en el 47 Festival Internacional Cervantino. Pero no sólo eso: los integrantes de esta banda comenzaron a vivir la pasión por la música con el punk, el hardcore, el rock y el ska, por lo que no soslayan el valor social y contestatario de este arte y así lo expresan en varias de sus canciones. El grupo presentó composiciones y arreglos propios, incluyendo adaptaciones que hicieron a una canción de Daniel Santos titulada “Yankee go home”. “La música en general es una herramienta social, política, una herramienta de construcción y de confrontación en los momentos en que tienen que ser, y venimos de un ambiente en que la música es contestataria. No podríamos hacer música de otra forma”, dijo en una breve charla con Apro al final del concierto el vocalista principal, Luis de la Rosa Solá. -¿Y hay algo más qué decir sobre ‘Yankee go home’? “Eso mismo, que se encarguen de resolver sus asuntos y que dejen al resto del mundo atender los suyos; que no se involucren más en los problemas del mundo porque lo único que hacen es joderla, y joderla y joderla”, respondió el vocalista. De la Rosa ha sido el cantante de la orquesta desde que éste surgió, en el 2008. Pero comenzó en los escenarios en otras agrupaciones desde mucho antes, a sus 15 años –actualmente tiene 42-, principalmente con el punk. “Funcionamos como una banda de punk que toca salsa”, define así el vocalista la esencia interpretativa de la orquesta. “Nos comportamos como una banda, todos tomamos parte de las decisiones”. Minutos antes, el grupo mantuvo de pie y siguiendo sus ritmos a decenas de personas que aprovecharon la explanada para bailar, gracias a su potente sonido, que evoca efectivamente, como lo refiere el programa impreso, la gloria latina de las grandes orquestas, sin menoscabo de entusiasmo. Una abrumadora mayoría de los 11 integrantes de El Macabeo se han formado fuera de alguna escuela de música, pero a cambio, hay una evidente pasión que cada uno demostró en trompeta, timbal, saxofón, trombón, teclado, bongó, bajo, güiro y maracas, además de la una particular influencia de géneros como el punk y el reggae. El Macabeo comenzó su internacionalización unos cuatro años después de su fundación en Puerto Rico. Es la tercera ocasión en que pisan suelo mexicano, la primera en el Festival Internacional Cervantino, aunque no la última, puesto que después de Guanajuato, se presentarán en la Ciudad de México, Acapulco, Veracruz y Chiapas, donde terminarán esta gira el 28 de octubre dentro del Festival Cervantino Barroco. “Habíamos estado solamente en la Ciudad de México, es la primera vez que salimos a estados”, dijo Luis de la Rosa. El grupo presentó las canciones de su última grabación, “La maldición del timbal” en una gala del Cervantino.