Noche espectacular en el segundo Festival Latino de la Salsa

domingo, 20 de octubre de 2019 · 20:13
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Arena Ciudad de México se convirtió en una enorme pista de baile en el segundo Festival Latino de la Salsa. Fueron casi cinco horas de música y baile en la que Diego Morán (Colombia), Willie Gonzalez (Puerto Rico) y Luis Enrique (Nicaragua) lograron poner sabor en el recinto del oriente de la ciudad —la noche del sábado—, que se dividió en dos: una pista para los que compraron boletos en zona baja y pudieron demostrar sus mejores pasos a gusto, y las gradas que no impidieron que los asistentes realizaran “vueltas” entre los pasillos. [caption id="attachment_603915" align="aligncenter" width="660"] Noche espectacular en el segundo Festival Latino de la Salsa. Foto: Niza Rivera[/caption] Primero Diego Morán, quien previamente dijo a Apro que anhelaba presentarse en dicho encuentro, ejecutó éxitos como “Sobredosis”, “No le pegue a la negra”, Quítate tú” y “Pal’ bailador”, mismos que pusieron el ambiente a la Arena. Moran, quien tiene 28 años de carrera artística, realizó una colaboración con la Internacional Sonora Santanera, y el resultado será un sencillo próximo a lanzarse en noviembre. Tras el colombiano llegó el momento para Willie González, quien ataviado en un traje de charro expresó su cariño por México, al que considera su segundo país. Interpretó temas como “Pequeñas cosas”, “No es casualidad”, “No podrás escapar de mí”, “Hazme olvidarla”, “Si supieras” y “Quiero morir en tu piel”, este último en homenaje al cantante José José, recién fallecido. [caption id="attachment_603916" align="aligncenter" width="660"] Noche espectacular en el segundo Festival Latino de la Salsa. Foto: Niza Rivera[/caption] El toque final de la noche lo dio el nicaragüense Luis Enrique quien impecablemente enfundado en un traje borgoña y camisa negra interpretó canciones como “Locos los dos”, “Desesperado”, “Así es la vida” y “Nicaragua, Nicaragüita” con la cual dio un mensaje político-social al comentar que esperaba pronto que tanto su patria como Ecuador y Venezuela fueran libres. “Yo soy un inmigrante, como muchos en 1978 emprendí un largo camino hacia el norte en búsqueda de una vida mejor, así que mi fuerte abrazo a México en estos momentos y a todos mis hermanos latinoamericanos” dijo antes de interpretar el sencillo “Autobiografía”. Más tarde llegaron “Cómo volver a ser feliz”, “Lo que pasó entre tú y yo pasó”, “Tú no le temes le amas” —uno de sus primeros hits—, y por supuesto la romántica y esperada de la noche “Yo no sé mañana” con la cual concluyó su participación y con ello el fin del segundo Festival de la Salsa Latina, mismo que ya empieza a colocarse como un gran referente de ese género en nuestro país.

Comentarios