'Han Solo: Una historia de Star Wars”: Una historia prescindible
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La cinta dirigida por Ron Howard tiene todo lo necesario para ser una buena película de entretenimiento: acción, aventura, un protagonista picaresco, carismático, guapo e inteligente, romance y personajes secundarios encantadores; sin embargo, algo le falta, y es que pareciera como si le hubieran quitado el alma.
Lo anterior era de esperarse luego de que el director Rian Johnson dividiera a la audiencia con el Episodio VIII en donde nos dijo, prácticamente, que dejáramos de vivir del pasado y evolucionáramos, que nos olvidáramos de los Jedi y de Skywalker. Así pues, Han Solo: Una historia de Star Wars (Solo: A Star Wars Story, EU-2018) carga una pesada lápida.
La historia nos muestra a un joven Han Solo (Alden Ehrenreich) deseoso de escapar de su planeta natal (Corelia), al lado de una joven hermosa llamada Q’ira (Emilia Clark), de quien está enamorado. Han quiere ser piloto y quiere ser libre y estar con Q’ira. Pero necesitan dinero, y para esto, el plan es robarle a una gángster local llamada Lady Proxima, una unidad de combustible conocido como Coaxium, que vale muchos créditos (así se le llama al dinero). Y es que cada pieza puede impulsar a toda una flota estelar. Por cierto, los dos jóvenes trabajan para Lady Proxima.
Han y Qi’ra consiguen burlar a Lady Proxima y sus secuaces para llegar al punto de salida, pero justo a un paso de su libertad los malosos consiguen atrapar a Qi’ra, mientras Han no tiene más remedio que seguir adelante. Pero promete volver por ella, así sea lo último que haga.
Así pues, Han entra a la academia militar de las tropas del imperio con la esperanza de convertirse en piloto y regresar por Qi’ra. Pero termina en la infantería y en el frente de batalla. Es en este escenario en donde conocerá a su mentor Tobias Beckett y a su grupo de maleantes, así como al gran Chewbacca; lo cual marca el inicio de la carrera de forajidos de Solo y su amigo Chewie.
Las cosas se complicarán y la vida de Han se convertirá en una persecución interminable. Pero también conocerá al carismático Lando Calrissian (Donald Glover) y a una androide un poco latosa, pero combativa y de mucha toma de conciencia llamada L3-37.
Los puntos más emotivos de la cinta son aquellos que nos conectan con la trilogía original: cómo conoce a Chewbacca, cómo obtiene su nombre, como conoce a Lando y obtiene el Halcón Milenario, pero por lo demás es inevitable pensar que la historia es intrascendente, es decir, la verdadera Historia (con mayúscula) en la vida de Solo es la que se conoce en la trilogía original; el amor de la vida de Solo es Leia y no Qi’ra; esta última es nada más un amor de juventud a la que uno no termina ni odiando ni amando.
Si Disney no quería que uno viviera del pasado, hubiera creado otra franquicia en vez de seguir mostrando personajes e historias relacionadas con la trilogía original, esa que en el Episodio VIII nos dijeron debíamos hacer a un lado. Entonces … ¿Para qué abordar la historia de Han Solo?
Para todo fan de Star Wars la cinta Han Solo: Una historia de Star Wars resultará de interés, pero está lejos de ser conmovedora y esencial para los amantes de la saga.