'Black Panther”, de Marvel Comics
T’Challa deberá guiar a su pueblo bajo un nuevo liderazgo que responda a las necesidades de su pueblo, y quizás a las del mundo. Y es que mientras Wakanda está viviendo las mieles de su desarrollo, el mundo entero se halla en crisis; la gente de color sufre y el dilema gira en torno a si Wakanda debe salir de las sombras para ayudar a los suyos y al resto del mundo. T’Challa deberá resolver estos conflictos internos a través de la presión de dos enemigos… la tradición, la globalización, la solidaridad y el odio serán una carga pesada para él. Black Panther es una orgía visual, efectiva en crear una Wakanda que combina la tradición y el misticismo con una estética futurista, mezcla entre el Rey León y Blade Runner. La parte visual es lo mejor de la cinta, quizá para cierto gusto un poco recargada, pero de ahí en fuera todo bien. Sin embargo, falla en la construcción de personajes: demasiada información para el tiempo en pantalla, de manera que no alcanza para simpatizar con las heridas de todos los personajes o sentir rechazo a sus motivaciones. A lo anterior habrá que agregar que tanto la trama como los personajes están construidos bajo un aspecto maniqueo: T’Challa es más que bueno, es noble y de buen corazón, con sus inseguridades, pero sin vicio alguno, mientras que su contraparte es el más malo de todo el mundo; Wakanda es el pueblo bueno que se tuvo que esconder del terrible hombre blanco. Black Panther (creado por Stan Lee y Jack Kirby para el número 52 de The Fantastic Four), no es la mejor película de súper héroes de Marvel Comics, no es la peor, pero su éxito radica más en su discurso de igualdad –si bien lleno de lugares comunes-- que en la fuerza de su trama.Long live the king. Marvel Studios' #BlackPanther tickets are now available: https://t.co/OT4u5v07bh pic.twitter.com/7kA8R9DaNm
— Black Panther (@theblackpanther) 9 de enero de 2018