Repudian ataques en París en celebración por los 70 años de la Unesco
MÉXICO, DF (apro).- Todavía con la conmoción por los atentados del Estado Islámico (EI) contra la población el viernes 13, se celebró en el Alcázar del Castillo de Chapultepec el 70 aniversario de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), que nació en 1945 en el marco de la posguerra mundial, con el fin de construir una cultura de paz entre los pueblos del mundo.
El acto encabezado por Nuria Sanz, directora y representante de la Unesco en México, fue ocasión para condenar el ataque y a la vez una manifestación de solidaridad con los franceses. La funcionaria de origen español señaló en su discurso:
“La convivencia pacífica entre los pueblos del mundo sigue siendo un desafío. Los últimos acontecimientos trágicos ocurridos en París nos recuerdan que en el luto hay que seguir luchando cada día por el ejercicio de los derechos humanos, y que la forma de expresión de las condolencias consiste en reafirmar nuestra acción apoyando el diálogo intercultural y la libertad de expresión.”
La ceremonia conmemorativa del 70 aniversario del organismo internacional tendría lugar el domingo 15, pero se suspendió en señal de duelo por lo ocurrido en París. Ahora –comentó Sanz– pese a “la tristeza, la rabia y la consternación” con la cual se recibieron las noticias, decidieron seguir con la ceremonia como un reconocimiento a los propósitos que dieron origen a la Unesco.
Y en tanto que uno de ellos es la conservación del patrimonio cultural de la humanidad, aludió a las recientes declaraciones del presidente francés François Hollande, quien propuso la restauración de sitios emblemáticos de Siria, entre ellos Palmira, dañados intencionalmente por el EI.
El pódium estuvo conformado por Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno de la Ciudad de México; Graco Ramírez, gobernador de Morelos; Rafael Pacchiano, secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales; Otto Granados, en representación del titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño.
También Vanessa Rubio, representante de José Antonio Meade, secretario de Desarrollo Social; Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), y Marcia de Castro, coordinadora residente en México del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Mancera, quien ha tenido que enfrentar una serie de ejecuciones en Iztapalapa (en uno de los casos la víctima apareció colgada de un puente de la demarcación el mes pasado), se dijo conmocionado y dolido por lo ocurrido en París, pues esos acontecimientos “nos dañan a todos”:
Aseguró que la Ciudad de México resiente también los hechos, pues “alteran la paz… la tranquilidad y el curso de la convivencia de las naciones del mundo”.
Y tras asegurar que México “es un país de paz” y el Distrito Federal “una ciudad de paz”, agregó:
“Hoy queremos alzar la voz una vez más para que se privilegie el diálogo, para que se pueda encontrar la solución a cualquier conflicto existente a través de los medios pacíficos, dejar de lado la práctica de las armas y la violencia.”
Rafael Tovar también condenó los ataques, “uno de los más bárbaros”, y confió en que “la convivencia a través de la cultura es posible.
En el acto participó la flautista Elena Durán, acompañada por el pianista Édgar Ibarra, quienes interpretaron Himno a la alegría, de Beethoven, Imagina, de John Lennon y una canción del compositor mexicano José Alfredo Jiménez.
El recuerdo del intelectual mexicano Jaime Torres Bodet (1902-1974), secretario de Educación Pública con Manuel Ávila Camacho y Adolfo López Mateos, y segundo director general de la Unesco, permeó la celebración.
Se recordó que desde su creación México signó el documento fundacional de la Unesco y que el organismo debe mucho a Torres Bodet, a quien se consideró un héroe, pues llevó planteamientos hechos entonces en México al plano internacional, entre ellos los programas de alfabetización.
Posteriormente se proyectó un video con fragmentos de entrevistas con los embajadores Carlos de Icaza, exrepresentante de México ante la Unesco, y Juan Manuel Gómez Robledo, quien en 2010, por cuestiones económicas, prefirió sacrificar la oficina de México en la Unesco que la de la OCDE; el antropólogo Rodolfo Stavenhagen; Lourdes Arizpe, exdirectora de Cultura de la Unesco, y Miguel León-Portilla, entre otros.
Para finalizar se llevaron a cabo mesas de análisis, en las cuales participaron, entre otros, el politólogo Leonardo Curzio, el investigador César Villanueva, el escritor Homero Aridjis, exrepresentante de México ante la Unesco, y Francisco López Morales, director de Patrimonio Mundial del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).