CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Debido a que los ensayos clínicos para desarrollar un tratamiento específico contra covid-19 no han sido exitosos, se ha tenido que recurrir al reposicionamiento de medicamentos, es decir, utilizar fármacos viejos para nuevas enfermedades, detalla un artículo publicado en el portal The Conversation.

“Los resultados positivos han permitido la aprobación de unos pocos fármacos que, inicialmente, son para otras enfermedades pero que han conseguido, con mayor o menor eficacia, contener la enfermedad”, señaló un artículo sobre la reutilización del fármaco viagra para tratar covid-19.

Puso como ejemplo los antivirales de uso contra la gripe, la hepatitis o el ébola, como el remdesivir y los últimos incorporados paxlovid y molnupavir, que se usan en las fases más graves de la enfermedad provocada por el coronavirus.

Una de las últimas propuestas es el uso del sildenafilo, conocido como viagra, y el óxido nítrico, aprovechando su capacidad vasodilatadora sobre el flujo sanguíneo.

“El óxido nítrico, cuya fórmula química y abreviatura es NO, es un gas incoloro y soluble al agua. Actúa como molécula señalizadora, es un mensajero y está involucrado en multitud de procesos relacionados con la vasodilatación de las paredes de venas y arterias (endotelio vascular) ejerciendo un potente efecto sobre las mismas”, indicó.

Destacó que está indicado para tratar la insuficiencia respiratoria en recién nacidos o la hipertensión pulmonar en cirugías cardiacas en niños y adolescentes.

El sildenafilo, principio activo de la viagra, aumenta el efecto vasodilatador del óxido nítrico al relajar los músculos y mejorar el flujo sanguíneo en diversos órganos del cuerpo.

Actúa en una proteína denominada PDE5 que se encuentra en la pared de las células (endotelio) del músculo liso de los pulmones y el pene, inhibiendo la vasoconstricción y actuando sinérgicamente con el efecto vasodilatador del NO.

“Por esta razón, varios grupos de investigación están iniciando ensayos clínicos para determinar el efecto conjunto del sildenafilo y el óxido nítrico en el tratamiento de los síntomas sobre todo pulmonares que causa covid-19”, señaló.

Viagra, una casualidad

En la década de los 80, Pfizer estaba probando un fármaco para el tratamiento de angina de pecho, el sildenafilo, cuyo principio activo actuaba sobre las arterias coronarias aumentando el flujo sanguíneo al corazón.

“El sildenafilo se reservó una sorpresa que afloró en los ensayos clínicos: los voluntarios participantes refirieron un efecto secundario inesperado en forma de erecciones sorprendentemente fuertes y persistentes. Se descubrió así, de forma totalmente casual, un fármaco para el tratamiento de la disfunción eréctil”, narró.

En 1998, la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) comercializó el sildenafilo como viagra, uno de los mayores éxitos del reposicionamiento.

Otros ejemplos de serendipia o casualidad son: la talidomida que se utiliza para tratar ciertos tipos de cáncer como el mieloma múltiple o como el eritema nodoso leproso severo; el minoxidil, indicado para tratar las úlceras y después se usó como medicamento antihipertensivo y después como tratamiento para revertir la caída del cabello.

En enero de 2022, en España, el 70.3% de los ensayos clínicos en curso para covid-19 se encuadran en el reposicionamiento terapéutico.

A nivel internacional, se han lanzado varios macro ensayos similares, como Solidarity, promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Recovery financiado por la Universidad de Oxford, pero ninguno arrojó resultados concluyentes para los medicamentos originalmente incluidos, pero si obtuvieron nuevas propuestas de medicamentos.