Opinión
AMLO, el regreso
La sola idea de que Andrés Manuel López Obrador viaje por todo el país es interpretada también como una acción urgente de fortalecer al gobierno y al partido que él creó, el cual sigue sin cuajar.Con la excusa del libro terminado y en el marco de su cumpleaños el pasado jueves 13 comenzó a circular en medios la versión de que el expresidente Andrés Manuel López Obrador saldrá del ostracismo de su finca para realizar una gira a nivel nacional.
El solo rumor de que López Obrador salga a la vida pública ha puesto a girar a toda velocidad las aspas del molino político con vientos a favor y en contra de la presidenta Claudia Sheinbaum y su partido Morena.
La oposición política y mediática asevera que la presencia de López Obrador es para poner orden en el gobierno y en Morena luego de los escándalos de varios de sus integrantes y dirigentes por acusaciones de corrupción, vínculos con el crimen organizado, lujos, viajes y otras acciones que son severamente criticadas.
También para nivelar la nave de Morena rumbo a las elecciones de 2027 y 2030, pues sin tener cuidado a la institucionalidad y menos al liderazgo de Claudia Sheinbaum en la presidencia y Luisa María Alcalde en la dirigencia de Morena, las tribus, corrientes, grupúsculos y personajes se enfrentan constantemente defendiendo sus intereses particulares.
La sola idea de que Andrés Manuel López Obrador viaje por todo el país es interpretada también como una acción urgente de fortalecer al gobierno y al partido que él creó, el cual sigue sin cuajar y en muchas ocasiones se muestra de rehén de personajes sumamente criticados.
En los hechos, esta sola posibilidad de que AMLO tenga presentaciones de su libro en plazas del país refleja una realidad: que sigue vivo su liderazgo en el panorama político nacional y refleja precisamente la carencia o la falta de liderazgos, tanto en Morena como en la oposición.
Sheinbaum es su heredera política al frente de la llamada Cuarta Transformación, y aunque ha impulsado las reformas constitucionales para pavimentar el segundo piso de este proyecto, la debilidad en la toma del timón ante las tempestades ha generado incertidumbre y críticas de los liderazgos al interior del gobierno, del Poder Legislativo y en Morena.
La corrupción, la violencia y la impunidad es una bestia de tres cabezas que sigue cabalgando por todo el país sin que sea domeñada o extinguida por esta administración, porque varios de sus integrantes son parte de este problema que se encarna en la colusión entre el poder político y el crimen organizado.
De ahí que el regreso de la figura de AMLO sea fundamental para el gobierno y Morena, pues se impone a la de cualquiera de sus integrantes que tienen sus propios proyectos, ajenos a los de Morena.
No obstante, para la oposición es un pretexto y oportunidad para criticar, cuestionar o denostar el proyecto de la Cuarta Transformación, que en esta segunda etapa ha mostrado debilidades profundas en temas de gobernabilidad y combate a la violencia.
AMLO es para la oposición sin memoria y menos aún ajena intencionadamente a las responsabilidades que ha tenido como gobierno, la representación de todos los males que sufre el país. De ahí que si regresa al ámbito de la vida pública veremos si será la figura en la que descargarán de manera catártica todas sus críticas y cuestionamientos.
Por cierto, López Obrador tiene 20 libros, que van desde ensayos políticos hasta su experiencia como presidente de México. Es “algo que les va a gustar mucho sobre nuestra grandeza cultural”, dijo el pasado primero de junio cuando salió a votar en la elección de los representantes del Poder Judicial.