SCJN
En medio de críticas a sus antecesores, Hugo Aguilar rinde su primer informe en la SCJN
“Recibimos una Corte lenta, anquilosada, ensimismada y podría decir que hasta soberbia”, afirma el ministro presidente. Niega subordinación a otros poderesCIUDAD DE MÉXICO (apro) En medio de críticas contra la anterior integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el ministro presidente Hugo Aguilar Ortiz rindió su primer informe de labores a tres meses de haber iniciado funciones y en el que afirmó que no hay subordinación a otros poderes.
Con cifras que ya había dado a conocer la SCJN, el ministro presidente indicó que en sus primeros 100 días de trabajo la nueva Corte ha buscado demostrar que la justicia no se reduce a las leyes sino a transformar vidas.
“Este primer informe se inscribe en el momento en que se marca un cambio de periodo y el inicio de una nueva etapa para la justicia en México. Es un punto de inflexión porque dejamos atrás modelos que ya no respondían a las necesidades del país y asumimos una visión distinta más abierta, más humana y más. Democrática, es el primer informe de una Corte elegida directamente por la ciudadanía por primera vez en nuestra historia constitucional”, dijo.
“Recibimos una Corte lenta, anquilosada, ensimismada y podría decir que hasta soberbia como órgano cúspide de nuestro sistema judicial. La Corte se sintió fuera de la mirada de todos, lejos de la fiscalización, la rendición de cuentas, la transparencia y, en general, no solo ajena al pueblo, sino incluso contra sus intereses y aspiraciones genuinas, los asuntos podían esperar años antes de recibir una resolución.
“Los expedientes se tramitaban con lentitud. Los engroses podían tardar meses. Asimismo, se atraían asuntos con el único fin de ganar tiempo, por lo que se guardaban sin pudor. En suma. La administración de los casos era una regla no escrita. Por esta razón, estamos cambiando la forma en que se debe concebir la Corte y su función dentro de la sociedad”.
Asisten Rosa Icela Rodríguez, Ernestina Godoy, Clara Brugada…
A diferencia del último informe de labores de la ministra en retiro, Norma Piña, en el que sólo hubo un representante del gobierno federal, el subsecretario de Gobernación, César Yáñez, en el primer informe de Aguilar Ortiz estuvieron representantes de los otros dos poderes de la Unión y prácticamente todos los integrantes de los plenos del Órgano de Administración Judicial (OAJ), el Tribunal de Disciplina Judicial (TDJ) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Como representante del Poder Ejecutivo estuvo Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación; del Legislativo estuvieron presentes Sergio Gutiérrez Luna, vicepresidente de la Mesa Directiva del Senado de la República y Laura Itzel Castillo, presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados; los tres se sentaron junto al ministro presidente para escuchar su informe.
Entre los invitados estuvo presente Ernestina Godoy, titular de la Fiscalía General de la República (FGR); Rafael Guerra Álvarez, magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México; Clara Brugada, jefa de Gobierno de la CDMX, por mencionar algunos.
Por ello, Aguilar Ortiz destacó que la presencia de los funcionarios de los tres poderes de la Unión constituye un acto republicano para ratificar su compromiso con los mandatos constitucionales que recibieron en las urnas.
“La Suprema Corte de Justicia de la Nación le pertenece a todos y a todas, ha culminado la etapa en la que los ministros y ministras eran designados por los otros poderes y, fieles a la designación cupular, sentían la obligación de servir a los más acomodados de nuestra patria. Hoy la Corte es diferente”, afirmó.
“El máximo tribunal fue concebido como una institución lejana limitada por tecnicismos y marcada por una estructura de privilegio que generaba distancia. Ese modelo generó una brecha entre la justicia y las personas hoy. Esa brecha ha comenzado a cerrarse”.
Añadió que en la actual Corte no existe sumisión ni subordinación sino corresponsabilidad y respeto a las atribuciones de los otros poderes de la Unión.
“Hemos impulsado y garantizado independencia judicial plena, así como adecuada y respetuosa vinculación con los otros poderes. Hoy existe un diálogo constante y maduro entre los poderes de la unión. Hoy no existe sumisión ni subordinación, sino corresponsabilidad institucional y respeto a las atribuciones de cada uno”, enfatizó.
“Esta Corte no se inclina ante ninguna agenda ajena al marco constitucional. Su única lealtad es hacia la Constitución y hacia el pueblo de México”.