Estados Unidos
¿Qué son los bombarderos B-2 que EU usó en su ataque contra instalaciones nucleares de Irán?
Los B-2 están entre los pocos aviones de la flota estadunidense capaces de transportar bombas de alta penetración de 13 mil 600 kilográmos.CIUDAD DE MÉXICO (France 24) .- Estados Unidos utilizó sus bombarderos B-2 en el reciente ataque contra Irán, según confirmaron fuentes militares. Las aeronaves, capaces de transportar bombas de gran penetración, fueron desplegadas para alcanzar la instalación nuclear subterránea de Fordow, en una acción que marca giro en el rol de Estados Unidos en el conflicto y que lo involucra directamente.
Durante días se había especulado sobre el paradero de los B-2 y su posible implicación en el conflicto. Ahora ya es un hecho: los bombarderos estadunidenses fueron utilizados en el ataque contra Irán, en una operación que marca un nuevo nivel de implicación directa de Washington en la guerra iniciada por Israel hace poco más de una semana.
Según fuentes militares, estas aeronaves participaron en una ofensiva dirigida contra la instalación subterránea de Fordow, ubicada a 150 km al sur de Teherán.
B-2 contra Fordow
Fordow es una de las instalaciones más protegidas del programa nuclear iraní, construida en una zona montañosa y profundamente enterrada bajo tierra. Para Israel, destruir un objetivo así con su propio arsenal era prácticamente imposible, pero muchos expertos habían adelantado que Estados Unidos tenía el armamento necesario para dar un golpe de dicho calibre.
“Estados Unidos dispone de bombas muy potentes diseñadas específicamente para destruir refugios subterráneos reforzados, como los de Fordow, de las que Israel no dispone. Se trata de artefactos que, para simplificar, solo pueden ser transportados por los B-2”, explicaba el analista militar Sim Tack antes del ataque.
Los B-2 están entre los pocos aviones de la flota estadunidense capaces de transportar estas bombas de alta penetración de 13 mil 600 kilográmos. “Para ser precisos, el B-2 tiene incluso espacio para transportar dos”, señala Ian Horwood, historiador y especialista en el Ejército estadunidense de la Universidad Saint John de York.
Aunque otros bombarderos como los B-52 podrían, en teoría, cumplir una misión similar, “los estadunidenses probablemente no correrían el riesgo de enviar un avión así, demasiado fácil de detectar”, indicaba previamente Frank Ledwidge, especialista en cuestiones militares de la Universidad de Portsmouth. El B-2, por el contrario, “probablemente es el más furtivo de la flota estadunidense”, según Horwood.
Una relación de larga data
Puesto en servicio a finales de los años 80, el B-2 fue concebido como parte de la fuerza de disuasión nuclear, con capacidad para alcanzar objetivos estratégicos en la Unión Soviética desde territorio estadunidense.
Su debut operativo llegó tras la Guerra Fría, en Kosovo, en 1999, cuando despegó desde Estados Unidos para bombardear Yugoslavia, estableciendo un récord de distancia operativa. Desde entonces ha participado en conflictos como Libia, Irak y Afganistán. Con solo 19 unidades, el B-2 es una pieza clave del arsenal aéreo de Estados Unidos.
En abril pasado, seis B-2 fueron enviados a la base estadunidense de Diego García, en el océano Índico, en una demostración de fuerza frente a los hutíes en Yemen. Esa misma base habría servido ahora de plataforma para lanzar la ofensiva contra Irán.
“Son bombarderos intercontinentales capaces de despegar desde su base principal en Missouri para atacar cualquier punto del globo”, explicaba Sim Tack.
Además, Tack sentenciaba que Estados Unidos podría ser más efectivo en la actualidad, pues "los israelíes han destruido la mayor parte de las defensas antiaéreas iraníes".