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Con Sheinbaum en el gobierno, la economía crece, pero desde la informalidad: ITESO

En el primer semestre de este año, la economía mexicana registró un crecimiento anual de apenas 0.7 por ciento. En contraste, el valor agregado bruto (VAB) de la economía informal creció 2.9% anual, es decir, más de cuatro veces el ritmo de expansión del PIB.
miércoles, 17 de diciembre de 2025 · 16:44

CIUDAD DE MÉXICO (apro) .- La informalidad “se ha convertido de manera preocupante” en el principal motor del crecimiento económico del país durante 2025 y, de no revertirse esta tendencia en 2026, México podría enfrentar un escenario más complejo durante el resto del sexenio de Claudia Sheinbaum Pardo. 

De acuerdo con un análisis del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), en el primer semestre de este año, la economía mexicana registró un crecimiento anual de apenas 0.7 por ciento. 

En contraste, el valor agregado bruto (VAB) de la economía informal creció 2.9% anual, es decir, más de cuatro veces el ritmo de expansión del Producto Interno Bruto (PIB) del país. "Esta diferencia evidencia que, en el contexto actual, la informalidad se ha convertido en un componente clave para sostener el crecimiento económico", señaló el ITESO.

También se muestra que la distribución territorial del VAB de la economía informal se encuentra altamente concentrada en pocas entidades federativas, lo que refleja ya la dependencia que cada estado tiene hacia ella, un rasgo central del funcionamiento económico del país.

El Estado de México (11.4%) y la Ciudad de México (10.2%) concentran conjuntamente más de una quinta parte del VAB informal nacional, seguidos por Jalisco (7.3%), Nuevo León (5.9%) y Veracruz (5.6%). 

Por sector de actividad, en las actividades primarias, mientras el PIB total creció 2.9 por ciento, el VAB informal avanzó 4.1 por ciento, lo que confirma el peso estructural de la informalidad en la agricultura, la ganadería, la pesca y las actividades forestales, donde el trabajo no protegido continúa siendo el principal mecanismo de inserción laboral y de generación de ingreso. 

En las actividades secundarias, la divergencia es aún más marcada. El PIB total cayó 1.0 por ciento, en tanto que la economía informal asociada a este sector creció 3.0 por ciento, impulsada principalmente por la construcción informal, que concentra el 14.4% del VAB informal total y registró una expansión anual de 6.8 por ciento.

Este comportamiento evidencia que la informalidad sigue funcionando como vía de absorción de empleo y actividad económica. 

En el caso de las actividades terciarias, el PIB total creció 1.3 por ciento, mientras que el VAB informal lo hizo a un ritmo mayor, de 2.7 por ciento. Este diferencial se explica por la elevada concentración del valor agregado informal en los servicios, que representan 61.3% del total, con un papel central del comercio, que aporta 36.9% del VAB informal y crece 2.9% anual. 

Destaca, además, el papel de los servicios profesionales, científicos y técnicos (12.8%), los servicios corporativos y de apoyo a los negocios (11.0%) y los servicios de esparcimiento (9.5%), lo que apunta a una informalización creciente de actividades tradicionalmente asociadas al sector formal, con implicaciones directas sobre productividad, seguridad social y calidad del empleo.

 

2026, un año complicado 

De no revertirse estas tendencias mediante mayor inversión productiva y fortalecimiento del sector formal, el ITESO sostuvo que el país podría entrar en 2026 "con un crecimiento limitado, menor capacidad de generación de empleo de calidad y una base productiva más frágil".

“La informalidad ya no opera solo como un amortiguador coyuntural, sino como un componente central del crecimiento reciente, tanto en actividades primarias como en la construcción y diversos servicios.

Este comportamiento revela limitaciones profundas del modelo de crecimiento para generar empleo formal y productividad sostenida”, se lee en el análisis. 

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